“Por primera vez en mucho tiempo da la sensación de que España no manda a Eurovisión un tema que intenta sonar “eurovisivo” o se apropia de las modas del momento para dárselas de actual. ‘La venda’ no es una composición espectacular, pero de entre las apuestas de Operación Triunfo para Tel Aviv era una de las destacadas desde que se lanzó su adelanto de 1 minuto y lo mejor es que no puede ser más tradicional y española, una charanga compuesta por La Pegatina (en serio, estamos llevando a La Pegatina a Eurovisión, ¿hola?) buenrollera y eufórica que, además, suena auténtica pese al sermoneo de su letra. Miki el Predicador quiere montar con ella una fiesta en el escenario de Eurovisión y lo tiene fácil porque la canción ya es una fiesta. La verdad, estoy contento con la elección… y mejor nos quedamos ‘Muérdeme’ para el verano, ¿verdad?» Jordi Bardají
«¿Otro catalán representando a España en Eurovisión? No descartemos que la presencia de Miki y ‘La venda’ en el certamen de la canción sea otra concesión de Pedro Sánchez a los políticos separatistas supuestamente golpistas y presuntamente perroflautistas de los que es rehén… Bromas aparte, la composición de Adriá Salas supone una domesticación apta para todos los públicos del ska-pop que factura con su grupo, La Pegatina. Es un estilo que a mí me resulta particularmente irritante, máxime si viene acompañado de una letra con poco sentido (el vergüenzajenómetro se dispara con el puente de «lo que ereh-ereh-hé») y, sobre todo, de un simpleza melódica supina, como es el caso —la de los versos es casi insultante–. Pero es sabido que a veces lo más sencillo es lo más eficaz, y ese podría ser el caso de nuestra candidatura a Tel Aviv: la vocación popular de la canción parece perfecta para un festival de estas características, y la fiesta, precisamente, que pueda organizar Miki quizá funcione. La impresión es que el de Terrassa ni siquiera necesitará grandes alardes vocales (que no son lo suyo) para hacer un buen papel». Raúl Guillén
.«Vista la desgana de María sobre la posibilidad de ir a Eurovisión y la sonrojante puesta en escena de ‘Muérdeme’, más en la fiesta de fin de curso de un modesto instituto que en la primera línea del pop urbano; ‘La venda’ era una de las mejores opciones de la selección española para el certamen. Aunque no se parece exactamente a Álvaro Soler, pues esta es una propuesta más perroflauta, sí transmite esa «alegría» que el cantante asentado en Berlín ha repartido por las listas europeas, conquistando Polonia, Italia, Austria o Alemania con varios de sus singles, de ‘Sofía’ a ‘La cintura’. A pesar de que el valor artístico de ‘La venda’ equivale a cero, Miki es muy mono (sorry, todo cuenta) y quizá pueda darnos una buena posición. Como curiosidad, ya han ido antes canciones empapadas de festividad ska a Eurovisión: Turquía quedó 4ª en 2004 con ‘For Real’; Grecia en 2013 fue 6ª con ‘Alcohol Is Free’, mientras Moldavia ha mandado en un par de ocasiones a la banda Zdob și Zdub, consiguiendo el 6º puesto en 2005 y en el 12º en 2011. En 2010, Lituania no logró llegar a la final con ‘East European Funk'». Sebas E. Alonso.