Andy Earl, el fotógrafo de confianza de Cranberries, el que por ejemplo les inmortalizara en un sofá en la portada de sus dos primeros discos, es el autor también de esta imagen actual sin la líder del grupo, la que en todas las ocasiones sin excepción acaparara el foco. Dolores O’Riordan fallecía el pasado año tras un período convulso de su vida del que irónicamente parecía estar recuperándose. Diagnosticada con trastorno bipolar y sin terminar de superar los abusos sexuales que sufrió entre los 8 y los 12 años por parte de un conocido de su familia, padeció anorexia nerviosa, en una ocasión asaltó a una azafata de vuelo en mitad de un delirio y en otra llegó a escribir una carta de suicidio, si bien se quedó dormida en el intento. Últimamente, en cambio, había vuelto a encontrar el amor tras su divorcio de su tour manager durante 20 años, formó el grupo D.A.R.K. junto a su nueva pareja y a un ex Smiths, y las cosas parecían marchar bien. Sin embargo, una madrugada de domingo a lunes (en pleno «Blue Monday») algo falló. Se quedó sola en un hotel de Londres a la espera de grabar unas voces para una versión de ‘Zombie’ y revisar unas mezclas de D.A.R.K., y los fantasmas del pasado debieron de volver. En cierta ocasión había dicho haber pasado 3 años sin beber ni una copa de vino, pero ese día no se acostó, llamó bien entrada la madrugada al director de su oficina de management y a su madre, quien notó que había estado bebiendo, y horas después se ahogó accidentalmente en la bañera en medio de una intoxicación etílica.
Pese a que Dolores era la autora de todas las letras del grupo y del 75% de la música, los chicos han podido terminar un nuevo disco de Cranberries que se edita el próximo 26 de abril. Dolores era una cantante excelente y a pesar de que las canciones en la fecha de su muerte solo eran maquetas, el acabado de los temas es bastante sólido. No encontraréis en el largo el nuevo ‘Animal Instinct’, que tendría guasa que llegara ahora, pero sí una sucesión de buenos temas que consolarán y mucho a los fans que aquel 15 de enero no sabíamos ni por dónde nos daba el aire.
Solo aquellos que saquen la lupa notarán que en un par de momentos la dicción de una frase no es tan hiperclara como a ella le gustaba, o que los típicos autocoros de sus discos en este caso no son al 100% solo suyos. Ha colaborado la cantante Johanna Cranitch, que hacía coros en las últimas giras de Cranberries, y aquí ha aportado como ellos dicen «oooohs» y «aaaahs», y algún subrayado muy puntual, que el oyente casual ni siquiera va a identificar. Queda expuesto sobre la mesa qué nivel de cantante era Dolores, dejando unas demos hechas que suenan como grabaciones profesionales en un 95% de los casos. Qué pena que se haya dejado de valorar en algún momento el oficio de ser un gran cantante.
El grupo ha explicado la grabación en un excelente reportaje de la revista Rolling Stone, en el que también se habla de cómo la banda esperaba desolada en el estudio de grabación que Dolores apareciera por la puerta en cualquier momento de la noche (los chicos solían grabar de día y ella iba de noche para añadir su parte y corregir cosas); de cómo la banda se derrumbó grabando el desgarrado tema ‘Lost’ (quizá por eso es el 2º corte de la secuencia aunque no es de los más inmediatos); y también de cómo vivieron con sus problemas mentales. En un momento, Dolores les ofreció a sus compañeros grabar la canción ‘So Good’, sin recordar que ya lo habían hecho para el disco anterior, ‘Roses’ (2012). Tras leer atentamente esta entrevista y las respetuosas y enriquecedoras concedidas a NME o The Guardian, cuando tengo la oportunidad de hablar por teléfono con Noel Hogan, guitarrista y único autor junto a Dolores, durante 20 minutos -estrictamente, ni uno más ni uno menos- decido tirar por lo concreto y muy poco por lo general. Ojalá fuera una opción conseguir entender algo de lo que ha pasado, a raíz de volver a preguntar lo mismo una y otra vez.
Me sorprendió leer en las entrevistas que decías que este disco, ‘In the End’, era alegre. Esperaba un disco triste después de vuestro tema de 2017 ‘Why’, el último de ‘Something Else’, que sonaba tristísimo, incluso como una despedida. Y ahora nos encontramos en cambio con canciones tan positivas como ‘Got It’ (que empieza tipo ‘Dreams’ pero luego evoluciona hacia otra cosa) o ‘Summer Song’. ¿Por qué esta diferencia?
Representan momentos diferentes de la vida de Dolores. Siempre sus diferentes estados de ánimo han estado muy documentados. Ella solía decir que era fácil escribir cuando estaba triste y en un lugar oscuro. Siempre hemos encontrado muy difícil escribir algo emocional cuando estás de buen humor. Sobre todo en cuanto a letras. ‘Why’ en particular viene de un momento difícil, que está documentado, del que ella a menudo solía hablar. Y en cambio este nuevo disco fue escrito durante el último año, sobre todo a finales de aquel año (2017), y refleja esas emociones. Hay altibajos, pero en verdad como en cualquier disco de Cranberries. Como has dicho, la gente espera un disco muy oscuro, pero hay que recordar que cuando lo escribimos no sabíamos lo qué iba a pasar, simplemente estábamos escribiendo otro disco de Cranberries, y por eso tiene esos altibajos.
‘Got It’ es muy feliz, pero contiene referencias a «morir» («¿dónde viviremos? / ¿cuándo moriremos? / la gente deberíamos decidirlo en sociedad»). Hay varias referencias a la muerte en el disco. Incluso el single habla de un «hotel en Londres». Obviamente Dolores no sabía qué iba a pasar, y la canción no va de eso. Pero por ejemplo sí había hablado mucho de cómo odiaba los hoteles durante las giras. ¿Qué piensas de esas referencias oscuras escritas en medio de un período feliz?
La gente va a leer entre líneas más allá de lo que ella quería decir. Ella contaba historias y cada canción va de una cosa. Hay muchas sobre relaciones, sobre rupturas obviamente porque se había separado de su marido… Y hay cosas que son más que nada una coincidencia. Si Dolores estuviera viva y el disco hubiera salido ahora, como tenía que salir, no habríamos pensado dos veces sobre algunos significados.
Mike (bajista, hermano de Noel) ha dicho que vosotros sabíais desde hace un tiempo que ella tenía problemas mentales serios. ¿Cuándo os disteis cuenta y qué consejo daríais a una banda joven que percibe que uno de sus miembros no está bien?
Hace unos años. Quizá 2010 o 2011. Tampoco sé si fue un momento concreto, es más que ves que cosas empiezan a pasar. Ves que hay algo no está bien. Al día siguiente de repente todo está bien. Es difícil dilucidar si es algo que está en tu cabeza, si es cosa tuya, o si hay un problema de verdad. Si tuviera que dar un consejo, sería que tienes que estar ahí y apoyar a esa persona lo mejor que puedas. No es un momento en el que abandonar y huir del problema. Siempre he sentido que hemos estado ahí al otro lado de la línea telefónica. Mandábamos un mail, lo hacíamos todo el tiempo, mails, mensajes… Tienes que estar ahí. Dolores tuvo mucha suerte en ese sentido, sobre todo su madre y sus hermanos la apoyaron muchísimo con eso.
«Creo que después de los dos primeros discos, deberíamos habernos retirado una temporada»
He leído que decís que el disco es un retorno a vuestros inicios y lo percibo en las guitarras a lo The Cure, y en los ritmos a lo The Smiths.
Sí.
¿Por qué siempre habéis intentado volver a ese sonido, en lugar de, por ejemplo, a ‘To The Faithful Departed’? ¿Os arrepentís de aquel álbum? Ni en los momentos más rockeros del disco, ese disco parece una referencia. (‘Wake Me When It’s Over’ es un cruce entre ‘Loser’ y ‘This Is The Day’, la orquestada ‘Catch Me If You Can’ es tipo ‘Show Me The Way’)
.¿Cuáles?
Las que me gustan son los singles: ‘Free to Decide’ estaba ahí, ‘When You’re Gone’, ‘Salvation’…
«Me gusta pensar que este disco suena como si grabáramos el primer disco ahora»
A mí me encanta ‘I’m Still Remembering’, pero nunca la tocabais…
¿Te gusta esa? (se ríe) No sé… Es extraño porque muchas de esas canciones no las volvimos a tocar nunca con el paso de los años. Es una época en que teníamos mucha presión. No pudimos hacer la gira mundial que se suponía que teníamos que hacer, porque estábamos deprimidos y tuvimos que tomarnos un descanso. Con el nuevo disco, volver al sonido del primer álbum fue una decisión consciente que hicimos con Stephen (Street, productor). Queríamos recapturar el sonido del primero, pero es algo muy difícil de conseguir. Creces como músico y aprendes cosas, eres más capaz, por mucho que intentes volver y hacer las mismas cosas. Pero me gusta pensar que este disco suena como si grabáramos el primer disco ahora, con la experiencia que tenemos. Lo que saldría de eso.
Pero tampoco habéis vuelto al sonido de ‘Linger’. Quiero decir que ‘Linger’ es una canción con millones de capas y detalles, si la oyes con cascos, hay un montón de cosas, cierta sobreproducción a la que tampoco habéis vuelto. ¿Por qué no habéis vuelto a ese sonido exactamente?
Mucha gente me lo está diciendo en estos últimos años. Pero nosotros éramos tan jóvenes cuando la escribimos, que no fue algo consciente. Teníamos 19 o 20 años. Lo que pedía la canción, lo poníamos. Tampoco éramos muy buenos músicos. Dolores era mucho mejor que nosotros porque había estudiado música desde pequeña. Pero nosotros tres solo habíamos tocado un par de años. Pusimos todos los trucos que nos sabíamos en esa canción. Creo que tener a Stephen fue una ayuda enorme en armarla para capturar los arreglos que pedía, porque en su esqueleto, la canción en sí era muy sencilla. Es muy básica. Y no había nada en la radio que sonara como ella, que es algo que puede ir muy en tu contra, pero que en este caso, fue a nuestro favor. Siempre intentamos hacer eso, no seguir las tendencias y hacer lo que en el momento creímos que estaba bien para que la canción sobreviviera por su cuenta.
«Siempre intentamos no seguir las tendencias y hacer lo que en el momento creímos que estaba bien para que la canción sobreviviera por su cuenta»
¿Con qué demo de la voz de Dolores ha sido más difícil trabajar porque no era tan clara o lo suficientemente buena? Creo que sus voces en el disco en general están bien, incluso a veces mejor que en ‘Something Else’, pero supongo que ha sido difícil porque no dejaban de ser demos.
Cada una tuvo su propio mérito. Emocionalmente ‘In the End’ fue la más difícil. Realmente no tuvimos que hacer nada con su voz en esa pista en concreto, pero la íbamos dejando para el final de la lista, aunque al principio no tenía ni título. Resultó que la grabamos los tres el último día. Y entonces nos dimos cuenta de que sería la última vez que estaríamos en una habitación como The Cranberries. Mike, Fergal y yo habíamos ido juntos a la escuela, incluso años antes de conocer a Dolores. Es triste darte cuenta de que esto iba a ser todo como Cranberries grabando. Es tan triste y la canción es tan triste a su vez…
Luego, hubo otra canción que fue duro armar, ‘Illusion’. La demo realmente la tenía desde hacía tiempo, pero no estaba terminada. Tenía la voz de Dolores, pero hay una parte en la demo, una sección, en que Dolores no canta. Es una especie, no sé cómo explicarlo, de middle eight, en el que había un cambio demasiado brusco. Stephen dijo que sonaba bien pero que teníamos que quitar esa parte y hacer otra cosa. Esa fue la más complicada. Tuvimos que improvisar cómo trabajarla con una estructura diferente de la que teníamos. Pero luego estaba ‘All Over Now’, cuya demo era muy parecida a como ha salido. Simplemente pusimos las baterías y los bajos adecuados. Y hubo muchas así, en que la demo era tal y como ha quedado.
«Hay estribillos sueltos, versos de otras, trozos… Cosas que tienen potencial pero no se pueden armar como canciones. Se quedarán en mi disco duro y nunca serán usadas»
¿Hay demos que no se han podido usar porque estaban demasiado inacabadas?
Sí, hay unas pocas. Dolores tenía ideas que no acababa. Hay estribillos sueltos, versos de otras, trozos…. Cosas que tienen potencial pero no se pueden armar como canciones. Se quedarán en mi disco duro y nunca serán usadas.
¿La canción que has contado que Dolores te envió por mail un día antes de morir es de las que sí se han podido completar?
Es una de las completas que está, sí.
¿Y cuál es?
Creo que fue ‘Got It’.
No me lo puedo creer, pero si es mi favorita. ¡Es de las alegres, y el estribillo es bastante divertido! (un trabalenguas tipo «creía que lo había entendido, pero se me fue, lo olvidé, no he entendido nada»).
Sí… (medio se ríe, medio suspira)
Luego hay un tema que no ha escrito con vosotros o sola, como siempre, ‘Summer Song’, que lo ha hecho con otra persona.
Sí, es Dan (Brodbeck). Lo escribió con él en Canadá, ella iba y venía de Nueva York a Canadá porque sus hijos estaban en Canadá. Dan es un ingeniero de sonido y productor con su propio estudio, y Dolores iba a trabajar con él porque había cosas como ProTools que no tenía interés en aprender a manejar. En Nueva York trabajaba en un pequeño estudio casero del apartamento con su novio y cuando iba a Canadá grababa voces con Dan. Esta canción surgió de ahí, pero no sé muy bien qué aportó cada uno porque simplemente me la mandaron. Sólo sé que la escribió con Dan.
Otra de mis favoritas es la balada (optimista) ‘A Place I Know’. En esta canción ella empieza diciendo «Yesterday’s Gone», y ya teníais una canción llamada así. Las dos canciones hablan de alguna manera sobre perder un hijo. ¿Crees que están conectadas?
Tiene que ver con hijos, pero ‘A Place I Know’ es una charla de una madre con su hijo, sobre irte a este sitio con él. Esa podría ser la conexión.
¿Hay otro disco de D.A.R.K. en camino?
No estoy seguro del todo. Sé que Dolores estaba en Londres para escuchar mezclas de D.A.R.K., pero no sabemos. Sé que estaba en ello pero no sé cuál es la situación exacta de ese disco.
El caso es que si estaba haciendo «mezclas», significa que el disco está básicamente hecho.
Sí, exactamente, sí…
Finalmente, sacaste con tu otro proyecto Mono Band canciones muy chulas como ‘Waves’ y ‘Crazy’. ¿Nunca intentaste encajarlas para Dolores o sabes si le gustaban? Porque ambas le pegaban…
No. Muchas canciones de aquel álbum empezaron en plan yo intentando hacer otro disco de Cranberries, pero de repente me empecé a interesar por las programaciones y los ordenadores. No creo que encajara mucho en Cranberries porque somos 4 y no iba a decirles «tú no sales en esta canción porque voy a poner ordenadores». Escribí esas canciones y luego la música empezó a desarrollarse. Conocí a otra gente y les mandaba las canciones para que las co-escribiesen. Nunca le pedí a Dolores que las cantara.