El relato de varias mujeres había incomodado profundamente a varios usuarios que habían comprado entradas para el tour de Ryan Adams. Algunos han contactado con Ticketmaster para que les devolvieran el dinero de las entradas, encontrándose con la negativa de la ticketera, que no quería asumir las pérdidas pues según las condiciones del servicio, el único caso en que se pueden devolver las entradas es cuando la gira o el concierto se suspenden, cosa que no había sucedido. Finalmente, unos días después, el tour ha sido suspendido, poniendo la carrera de Ryan Adams definitivamente en «stand by», y haciendo que su contratación a partir de ahora sea muy difícil.
Ryan Adams pidió perdón si había causado algún mal al publicarse el artículo de The New York Times, pero añadiendo que el periódico estaba ofreciendo una imagen de él sesgada. Desde entonces ha guardado silencio sobre este asunto.