«La canción de ‘Madame X‘ seleccionada por Madonna para Eurovisión puede ser random o no. Al fin y al cabo, ‘Future’ es una canción reggae y Jamaica es un país históricamente asociado a la lucha contra el apartheid, lo cual puede ser intencionado aunque, francamente, lo dudo. Más bien, la elección parece responder a la necesidad de Madonna de presentar literalmente ante medio mundo un tema inmediato y pegadizo, y ‘Future’ sin duda lo es. Aunque lo que hace destacar la canción es su atmósfera: al margen de un Quavo que aporta sus versos sin dejar demasiada huella, Diplo claramente busca en esta producción el elemento «old-school» en una canción que irónicamente suena rescatada del pasado en el buen sentido. Sin embargo, ‘Future’ termina sonando bastante sucia e industrial, post-apocalíptica incluso, con ese piano fragmentado que le da inicio, esos rayos láser que suenan de vez en cuando, ese autotune en la voz de Madonna que parece deteriorarse por momentos o esas trompetillas tristes que adornan la canción. Sin duda, es tristona toda la ambientación de ‘Future’ pese a su mensaje de esperanza, y eso es quizá lo mejor de ella, que anima a la lucha pero sin esconder cierto desánimo. De los 4 adelantos de ‘Madame X’ conocidos hasta la fecha, mi favorito». Jordi Bardají
«Madonna ha dado en ‘Medellín‘ con uno de los mayores growers de su carrera. Al principio, descoloca. A la larga, es una de sus canciones más adictivas. ‘Future’, en cambio, no descoloca tanto. Diplo y Madonna, en lugar de retorcer los estándares de un género, como Madonna y Mirwais acaban de hacer con el reggaetón, simplemente replica los ritmos jamaicanos con los que ambos jugaron en ‘Unapologetic Bitch’, solo que sin la divertida letra de aquella canción que un día se barajó como primer sencillo de ‘Rebel Heart’. ‘Future’ ha escogido centrarse en su mensaje de positividad, dejando claro que si Madonna la va a interpretar en Eurovisión, cuando precisamente se celebra en Israel, es por su mensaje por la paz y por un «futuro» mejor. Su letra habla de que no todos conseguiremos «llegar al futuro», de los que han optado por «quedarse en el pasado», de la «paz», de la «esperanza» y de las «vibraciones positivas»… exactamente como tantas canciones del festival. Tiene sentido, pero es claramente la menos interesante de las cuatro canciones de ‘Madame X’ que conocemos (se rumorea que no le han dejado interpretar ‘God Control’, que habla el uso de armas), lo cual deja en muy mal lugar a Diplo, ¿que acaso se ha quedado definitivamente «en el pasado»? Pasa de Diplo, Mambo, queremos más chachachá». Sebas E. Alonso
.«Resulta raro que Madonna quiera presentar ‘Future’ en Eurovisión, más allá de por el doble sentido que pueda tener su letra, y es normal que los fans no compartan la decisión. ¿Puede que ‘Madame X’ tenga mejores canciones? Probablemente. Pero ‘Future’ no es una mala canción, y de hecho es mejor que ‘Medellín’ y ‘I Rise‘ (de momento ‘Crave‘ va ganando la partida). El referente más obvio es ‘Unapologetic Bitch’ y, como aquella o como ‘Revolver’, ‘Future’ no es una gran canción pero sí un pegajoso tema con potencial de grower disfrutón. Por lo demás, Quavo sobra como de costumbre, pero aquí no molesta demasiado, y esas trompetas son un «sí» como una catedral». Pablo N. Tocino.
«La verdad es que parece bastante coherente que ‘Future’ sea una inmersión en la tradición reggae. Al menos teniendo en cuenta que singles como ‘Medellín’ y el pseudo-trap ‘Crave’ apuntan a ‘Madame X’ como el disco más global y abierto en la carrera de Madonna, sin duda influenciado por haber residido en Lisboa el último par de años. También parece acertado que, para construirlo, se haya rodeado de dos artistas que dominan el lenguaje urbano como Diplo y Quavo. Sin embargo, aunque lo cierto es que el primero presenta algunos valiosos hallazgos instrumentales (las trompetas que irrumpen después del 2º estribillo, y que se convierten en uno de los mejores ganchos del tema), ‘Future’ no pasa de ser un filler que, teniendo en cuenta la raquítica propuesta melódica, acaba despertando algún bostezo que otro. Y, de nuevo, el protagonismo de ese terrible efecto en la voz de Madonna al que ha cogido tanto gusto me hace torcer el morro». Raúl Guillén.