El tema combina así perfectamente la triste melodía de la guitarrita a la moda de la radiofórmula de esta década, con un punto de superación casi humorístico, retratado en ese estribillo que dice: «Never got tears for that sucker / only one dick that’s a bummer». El crescendo final termina por hacer despegar esta producción de Shellback y The Struts que además viene presentada por un curioso «lyric video».
En el vídeo la idea de la artista para terminar de convencer a su amiga de salir de su relación tóxica ha sido ponerse en paños menores a bailar. Incluso se anima a hacer sus pequeños pinitos con el twerking. Tove Lo vuelve a mostrar que es una gran defensora del uso de su sexualidad a su manera, como ya mostró en lanzamientos tan cargados de sexo como el single ‘Disco Tits‘, el álbum ‘Lady Wood’ o aquel mediometraje que hizo y en el que aparecía masturbándose.
El disco que contendrá este tema se llamará ‘Sunshine Kitty’ y Universal España da ya algún detalle sobre él: «La artista nacida en Estocolmo ha confirmado que su 4º álbum de estudio está de camino. Grabado entre Los Ángeles y Suecia, “Sunshine Kitty” representa un nuevo capítulo para Tove, marcado por la reivindicación de la confianza y la sabiduría adquirida y, de nuevo, un romance en ciernes. El título es “una obra sobre el poder femenino, pero feliz, visto de un modo positivo” declara Tove Lo. “Enlaza con un lince. Este dibujo animado (que aparece en la portada) es una extensión de mí misma y parte de la nueva música. Es monísima, pero hace tonterías como pelearse y emborracharse. Siento que es el sonido del disco”».
Dice Tove Lo: “Cuando hice Lady Wood, estaba enfrascada en el miedo. Tuve una intervención vocal un año antes, llevo cantando desde los 14. Pasé la operación y supe que tenía que volver a empezar de nuevo. No dejaba de preocuparme por mi voz, me llevó mucho tiempo sentirme a gusto de nuevo. Estaba pasando por una ruptura y aclimatándome a mi nueva vida, en el punto de mira, con mucha gente cambiando en mi entorno. Finalmente me encuentro en un lugar donde hay retos, pero me siento más cómoda viviendo la extrañeza de poner mi corazón en un papel para que todo el mundo pueda escucharlo. Entiendo que necesito expresarme mejor sobre lo que necesito, soy vulnerable, pero no estoy enfadada. Con la misma honestidad emocional, pero con mayor felicidad”.