En contra de la estructura esquiva (aunque apasionante) de ese otro single, ‘How To Forgive’ es de una sencillez encantadora que, tal y como explica Moore en un post de Instagram, buscaba mirarse en el sonido de «la primera Madonna», buscando un sonido vocal muy femenino. Y lo cierto es que, al decirlo, parece inevitable encontrar en ella conexiones melódicas con temas como ‘Angel’, ‘Dress You Up’ o ‘Jimmy Jimmy’. Pero, evidentemente, con un tratamiento musical muy distinto, en este caso más sobrio y reposado.
Por contra Alaina decidió, en lugar de pitchear su voz, tratar de cantar con su voz en el tono más alto que fuera capaz. «El resultado es la canción más difícil (de interpretar) que haya compuesto nunca para mí misma», añade, calificándolo de «pesadilla» y explicando que incluso llegó a llorar al cantar la frase al principio del segundo verso «I’ve been questioning myself». Mientras ella entraba en modo rabieta, Patrick montó la canción con esas dos primeras tomas vocales, y pese a ser muy crudas e imperfectas, el resultado les encantó. A nosotros también, puesto que se trata de una de las canciones más bonitas e inmediatas de la carrera del dúo de Denver, especialmente emocionante en ese estribillo que podrían haber entonado The Shirelles y que dice «¿Cómo iba a disfrazar la manera en que me siento? / Tengo mis razones, podría darte un millón».