La decisión definitiva de Hachette, que ha informado devolverá los derechos del libro a Woody Allen, ha sido cuestionada por varios nombres destacados, entre ellos el escritor Stephen King, quien, en una serie de tuits, ha compartido su opinión al respecto, desfavorable. Ha dicho: «La decisión de Hachette de anular el libro de Woody Allen me incomoda mucho. No es por él, me importa un pimiento el señor Allen. Lo que me preocupa es a quien le pondrán la mordaza después». El escritor ha añadido que «una vez empiezas, el siguiente es más fácil» y ha matizado que le parece «ignorante de cojones» que Hachette aprobara publicar las memorias de Woody Allen –acusado
de abusos sexuales por su hija, Dylan Farrow- después de editar el libro de su hijo.En España ha sido la autora Elvira Lindo quien ha criticado duramente el veto al libro de Woody Allen en un artículo llamado «matar a Woody Allen» que se ha viralizado en Twitter. Lindo argumenta que «parece no importar que la justicia haya desestimado dos veces la culpabilidad del director en los abusos que le achaca su hija», compara el trato a Allen con el «damnatio memoriae que se practicaba en la Antigua Roma» y critica el «feminismo hollywoodiense y la «negación del otro como ser humano» que ejerce, según ella, Ronan contra su padre.