Música

¿Es «tóxico» el movimiento #FreeBritney?

Britney Spears es noticia estos días después de haber tomado fuerza en internet nuevamente el movimiento #FreeBritney, que busca liberar a la artista de la tutela a la que lleva sometida desde 2008, año en que, después de ser ingresada en un centro psiquiátrico contra su voluntad, Britney era declarada legalmente incapaz de hacerse cargo de sus propias finanzas y de sí misma.

El origen del resurgimiento del movimiento en la red ha sido un post de Instagram que detalla los supuestos males de dicha tutela, como que Britney no ha parado de trabajar en todos estos años a pesar de legalmente no poder tomar sus propias decisiones, por lo que en realidad no necesitaría esta tutela y estaría siendo explotada por su familia y equipo con fines económicos.

El movimiento #FreeBritney ha sido creado por dos humoristas y seguidoras de Britney que presentaban un podcast en el que explicaban sus preocupaciones y sospechas sobre el estado de la cantante, como que su padre -quien durante años fue su tutor legal, ahora lo es la especialista Jodi Montgomery- le ha estado obligando a tomar ciertas drogas psiquiátricas. El debate en torno a la complicada situación de Britney ha llegado a generar 2.308 páginas en el foro BreatheHeavy (el más popular dedicado a la cantante) desde su comienzo a principios de junio de 2018, pero es ahora cuando ha llegado a la conciencia popular, llegando a medios españoles como RTVE.es o El Mundo.

Una vez alcanzado el público generalista, el movimiento está dando lugar a todo tipo de conspiraciones en la red relacionadas con el estado de salud de Britney, como que la intérprete de ‘Toxic’ estaría mandando mensajes de auxilio subliminales a través de sus extraños vídeos de Instagram -en los que se dedica a improvisar coreografías al ritmo de canciones de Rihanna o Billie Eilish o a realizar sus propios pases de moda, si bien pareciendo un poco «ida»-; o que incluso estaría siendo víctima de un secuestro -en su propia casa- o del «tráfico de personas».

Para poner fin a las especulaciones, TMZ ha reiterado recientemente lo que ya comunicó hace un par de años, que Britney «necesita» ayuda psiquiátrica -sigue sin desvelarse exactamente qué dolencia mental padece- y por tanto seguir bajo la tutela legal de segundas y terceras personas, probablemente «de por vida». Además de su familia, están involucrados en la tutela de Britney «doctores, abogados, terapeutas y un juez». Todos ellos deciden colectivamente qué es lo mejor para la cantante, si bien esta sí ha estado reclamando «más libertad» en tiempos recientes, pues por ejemplo apenas se le permite ver a sus hijos, cuya custodia retiene principalmente Kevin Federline. En su noticia, TMZ se ha visto obligado a desmentir que Britney esté «secuestrada» e informa que últimamente ha sido «difícil tratar con ella» y que su estado mental ha sido «inestable».

Posteriormente, la hermana de Britney, Jamie Lynn, ha compartido una reflexión relacionada con el movimiento #FreeBritney -aunque sin mencionarlo explícitamente- a raíz de las comparaciones que este ha suscitado con la situación actual de Kanye West, que también está siendo objeto de burla en las redes: «Si padeces una enfermedad mental o te preocupa alguien que lo hace, sabes lo importante que es respetar su situación con privacidad para esa persona, y que la familia intente proteger a sus seres queridos, sin importar lo que el público vea de puertas para afuera», ha dicho la cantante y actriz.

Hoy 22 de julio tiene lugar una nueva audiencia judicial para revisar las condiciones de la tutela de Britney Spears. Mientras, el próximo mes de agosto se cumplirán cuatro años desde el lanzamiento de ‘Glory‘, el hasta ahora último álbum de estudio de Britney: es el mayor lapso de tiempo entre discos de su carrera. La artista ha reeditado recientemente el álbum en las plataformas de streaming con la que iba a ser su carátula original y un bonus track, ‘Mood Ring’, antes solo disponible en la edición japonesa del disco.

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Publicado por
Jordi Bardají