No es verano en el calendario, sí en nuestros corazones, easy life lo saben y esta semana debutan con un disco veraniego llamado ‘life’s a beach’ en el que el agua no deja de aparecer en diferentes formas: playas, océanos y botes salvavidas sirven al grupo autor de un hit llamado ‘sangria’ con Arlo Parks como metáfora de sus emociones. ‘life’s a beach’ no es tampoco un disco de barbacoas y chiringuitos; hay un poso melancólico en las melodías y las letras tratan temas como la depresión y el desamor. En verdad, es uno de esos álbumes llamados a ser el «disco del verano» del sector alternativo que anteriormente ha tenido como discos de cabecera para esta estación lanzamientos de Hot Chip, Pet Shop Boys o Lo-fi-fnk.
A easy life, eso sí, les interesa mucho el rap, el R&B y el funky curtidos al otro lado del Atlántico. En ‘lifeboat’ de hecho querían referenciar abiertamente «las canciones «cheesy» de Outkast, en busca de la aprobación de André 3000″. Esta afirmación da buena cuenta también de su sentido del humor, y de lo divertido que puede llegar a ser el álbum, y ahí es donde hay que hablar del líder de la banda de Leicester, Murray Matravers. Su timbre es muy Alexis Taylor, su narrativa es más bien de la escuela de Mike Skinner y Lily Allen, y tan pronto te toca un saxo como se queda el principal gancho de la canción por encima de teclados y estribillos. En el mejor tema del álbum, ‘skeletons’, es adorable su pronunciación de frases tan tontas como «just rumours from losers» o «fasten your seatbelts, call the police». Esa cosa llamada carisma.
Es esta una canción bailable, sin que el pop electrónico ni llenar las pistas sean el objetivo principal de una banda en la que la sección de vientos parece fundamental -que no indispensable-. Cuando samplean el tema ‘Loved the Ocean’ de Emilia Ali en la preciosa ‘ocean view’, con las voces totalmente pitcheadas, son las virguerías vocales de Kanye West y Frank Ocean las que vienen a la cabeza. ‘daydreams’ samplea también un tema llamado casi igual de Aretha Franklin, siendo una de esas piezas bonitas entre el rap y el soul clásico que tanto se llevaban a principios de siglo. Podría haber sido una producción de Avalanches. El soul, de hecho, insufla vida a producciones tan constructivas como ‘a message to myself’ o la romántica ‘have a great day’.
En otros momentos falta algo de gas, como en esa segunda mitad inaugurada con ‘living strange’ y en la que sobre todo despiertas con el Autotune de ‘lifeboat’, las trompetillas del single ‘nightmares’ y finalmente ‘music to walk home to’. El álbum se cierra con esta improvisación en la que Murray narra todo lo que ve al volver a casa después de «una noche increíble». Jura que la escribió «muy, muy borracho con Fraser T. Smith, mientras escuchaba a Fela Kuti», y nos lo creemos, pues está más cerca de la broma interna que de la universalidad de un ‘Blinded by the Lights’. Aun así, por alguna razón funciona, bien sea el flow de Murray, la guitarra funky o las ganas de que se nos vayan los pies con una tontería como esta en un festival de pie. En algún lugar intermedio entre Mac De Marco y el indie hip hop, easy life parecen estar en el lugar adecuado en el momento adecuado.