Rex Orange County es una de las grandes estrellas del bedroom-pop desde que empezó a subir maquetas a Soundcloud y Tyler, the Creator le descubrió. Desde entonces, el joven artista británico ha colaborado con Tyler en su álbum de 2017 nominado a los GRAMMY ‘Flower Boy’, ha publicado dos álbumes de forma independiente y ha llegado al top 3 en Estados Unidos con su debut en una multinacional, ‘Pony’. Ahora llega su continuación, un cuarto trabajo que sigue dejando tantas certezas como dudas.
‘WHO CARES?’ es un álbum que Alex O’Connor ha compuesto en Ámsterdam, según nos ha contado él mismo, en un total de 12 días, junto a sus amigos músicos Joe MacLaren y Benny Sings y, como tal, suena espontáneo e incluso improvisado, algo que se nota especialmente en la instrumentación y la producción, que se ha simplificado respecto a discos anteriores, lo cual juega a favor de unas canciones que siguen apegadas al pop-soul de los 70 por la vía del bedroom-pop, logrando cierta atemporalidad.
Las canciones -en concreto las melodías- pueden ser encantadoras, como el single ‘KEEP IT UP’, cuya letra llena de esperanza resuena en todo el disco por razones que veremos más adelante, o la romanticona ‘ONE IN A MILLION’ y, a lo largo del álbum, Alex explora la misma fórmula con acierto: ‘OPEN A WINDOW’ presenta un simpático punto «easy-listening» con la compañía de Tyler, the Creator, ‘AMAZING’ es otro single de melodía adorable que reconforta, y ‘MAKING TIME’ es una preciosa miniatura pop que habría merecido una producción más cuidada, no tan dejada, aunque sea deliberado.
Las melodías de ‘WHO CARES?’ enmascaran unas letras que transmiten desesperación y hastío por las dificultades que encuentra Alex a la hora de relacionarse con los demás o consigo mismo. Los teclados de ‘WORTH IT’ son brillantes y ufanos, pero Alex narra un momento de depresión en el que se pregunta si «valía la pena» seguir viviendo porque ha perdido la ilusión de antaño, y en ‘7AM’ se flagela a sí mismo de varias maneras, incidiendo en su capacidad para cagarla pero sin perder la esperanza: «supongo que algún día seré un hombre mejor».
A lo largo de ‘WHO CARES?’ esperas que Alex cumpla su propósito. En sus letras, Alex dibuja el perfil de muchacho inseguro que deposita toda la responsabilidad de su bienestar emocional en la otra persona. Esa persona, su chica, ha «venido a salvarle», como canta textualmente en ‘AMAZING’, y Alex es consciente de que sus «ralladas» afectan negativamente a la otra persona: en la semi rockera ‘IF YOU WANT IT’ lo dice tal cual. Aun así, Alex intenta que su chica le haga compañía solo a él y nadie más en ‘THE SHADE’ («me gustaría quedarme contigo, sin nadie más, nosotros dos nos bastamos, por favor, no te vayas»).
Las personas son complejas, y también lo es este disco aunque no lo parezca, al estar compuesto por canciones de pop adorables que resultan atractivas por una razón, pero causan cierto rechazo por otra. Quizá, por eso, da tantas ganas de seguir volviendo a ‘KEEP IT UP’. En ella, Alex describe su inseguridad pero, en el estribillo, deja un mensaje universal, no dirigido a su novia, sino a sí mismo y, por extensión, también a su público: «tira para adelante, solo estás aparcando lo que realmente quieres hacer, ya no debes nada a los extraños, ya está bien». La canción reconforta como un cálido abrazo, lo justo para no asfixiar.