Música

PUTOCHINOMARICÓN / JÁJÁ ÉQÚÍSDÉ (Distopía aburrida)

Por un momento pensábamos que habíamos perdido a PUTOCHINOMARICÓN. Han pasado hasta 3 años desde ‘Miseria humana‘, aquella mixtape que al principio iba a salir en vinilo pero luego no porque su sonido no le convencía. Es hasta obviada en la nota de prensa de Elefant sobre este lanzamiento. Y no estaba tan mal. No tenía el foco puesto, sumando baladas a piano y canciones más rock, pero sí dejó algunos hitos como ‘Deporte nacional’, ‘Ojalá te murieras’ o ‘Parkineo’.

También hemos sabido que PUTOCHINOMARICÓN ha viajado a Taipéi en busca de sus raíces. Su nacionalidad sigue siendo española, pues su pasaporte relucirá para siempre para alegría de Santiago Abascal en la portada de su debut, pero ha querido acercarse a Asia durante este tiempo, topando con la decepción de que la cultura blanca ha impregnado por completo la cultura queer de este lugar. Lo que le ha llevado incluso a abortar un disco influido por la escala pentatónica. ‘JÁJÁ ÉQÚÍSDÉ (Distopía aburrida)’ continúa por tanto siendo una nueva búsqueda de sí mismx, a veces infructuosa. El álbum también está firmado con su nombre real Chenta Tsai, como si estuviera a punto de dar el paso de deshacerse del alias de PUTOCHINOMARICÓN, pero no se hubiera terminado de atrever.

Ese paso que tanta pena nos va a dar que dé, pues PUTOCHINOMARICÓN es uno de los nombres más icónicos de la historia del pop español, se corresponde también con una mejor línea artística en este tercer «conjunto de canciones». Las baladas a piano y las derivas eléctricas se aparcan a un lado. Ya no Charli XCX, sino la muerte de SOPHIE parece haber inspirado algunos de los experimentos más extremos que hemos escuchado en Chenta, gran seguidorx de la PC Music. El álbum comienza casi incomprensible en ‘Renacentista de tutorial’ y termina con una producción tan aventurera como ‘Tu foto de perfil’, con todo tipo de trucos y virguerías sobre todo en su último minuto.

Entre medias, encontramos canciones más convencionales, como ‘DM’, un R&B sobre una conquista online, y un par de temas que podemos vincular con el sonido PC Music pero también con el pop más asequible de Vengaboys, Chimo Bayo y Rebeca. Así de pegadizas y machaconas son ‘Tamagotchi‘, ‘Chique de internet’ y ‘Otra fisicalidad’, que hasta recuerda a Whitney Houston en sus primeros segundos.

PUTOCHINOMARICÓN colabora con varios productores semidesconocidos, como Ignacio Redard o New Sylveon, jugueteando con ellos con ritmos como el breakbeat; y también con varias cantantes, como la sueca afincada en Berlín Tami T o GOFTY, quienes aportan algunos versos en inglés. Incluso hay una canción completamente en este otro idioma, una ‘Rubberhand’ que recuerda a la faz más pop de Kraftwerk. Sin embargo, todo es tan 100% PUTOCHINOMARICÓN que son meros pasatiempos en el que es el disco más largo de Chenta por el momento: casi 29 minutos.

Las canciones de ‘JÁJÁ ÉQÚÍSDÉ (Distopía aburrida)’ se dividen en tres grupos: la realidad online, la realidad fuera de línea (la esclavitud capitalista es el tema de la «intro») y la realidad aumentada, siendo todo en verdad tan Chenta Tsai que incluso corre el peligro de encasillarse en el futuro. De momento suenan pertinentes y actuales los problemas de autoestima de ‘Adulto incomprendido’ (sobre un «inocente adultescente» que no sabe estar consigx mismx), ese ‘Chique de internet’ que propone que «la vida en virtual es más de lo que te imaginas», ese ‘Traumas’ («soy el marginado del recreo otra vez, me meto en el baño pa desaparecer») y hasta la autoparodia final que nos deja ‘Tu foto de perfil’: «Soy patético, ¿a que sí? Dándole vueltas sin fin».

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Publicado por
Sebas E. Alonso