Milan Kundera, el escritor checo autor de ‘La broma’ (1967), ‘El libro de la risa y el olvido’ (1979) o ‘La insoportable levedad del ser‘ (1984), ha fallecido este miércoles a los 94 años de edad, ha confirmado la televisión pública checa.
Conocido por sus novelas, pero también por su labor como dramaturgo o poeta, o por sus ensayos y relatos cortos, Kundera fue uno de los autores europeos destacados de la segunda mitad del siglo XX. Como autor checo fue crítico con el totalitarismo de la Unión Soviética, aunque como en su primera novela, ‘La broma’ (1967), una sátira del estalinismo que fue un inmediato éxito internacional. Estéticamente, su obra podía adquirir un cariz filosófico y existencialista.
El componente filosófico de la obra de Kundera quedó plasmado en su novela más popular, ‘La insoportable levedad del ser’ (1984), cuyo icónico título a muchos les sonará aunque no hayan leído el libro. Un relato existencialista sobre la vida en pareja, con el telón de la represión comunista de fondo, que no ha abandonado las estanterías. ‘La insoportable levedad del ser’ tardó 22 años en ser editado en República Checa: fue en 2006.
La vida de Kundera -personal y profesional- estuvo marcada por la disidencia política, aunque él no se considerara disidente. En 1950 fue expulsado del Partido Comunista, al que se afilió al término de la Segunda Guerra Mundial, por presuntas actividades contra el partido. En 1956 fue readmitido, y en 1970 fue expulsado de nuevo por su participación en la Primavera de Praga. En 1967 las novelas de Kundera fueron prohibidas en Checoslovaquia y el escritor tuvo que ganarse la vida -entre otros empleos- como pianista de jazz, pues su padre era el reconocido músico Ludvík Kundera y Kundera sabía tocar el piano desde niño.
En 1975, Kundera emigró a Francia gracias a que las autoridades checoslovacas le dieron el permiso para hacerlo. Se instaló en París, ciudad en la que ha vivido durante los últimos 50 años y en la que ha fallecido. Desde 1993, Kundera ha escrito todas sus novelas en francés, y en este idioma han sido redactadas sus últimas cuatro obras, ‘La lentitud’ (1995), ‘La identidad’ (1998), ‘La ignorancia’ (2000) y ‘La fiesta de la insignificancia’ (2014).