Entre visita y visita al juzgado, Donald Trump sigue con su campaña electoral para volver a la Casa Blanca el año que viene. Su primer mitin lo dio el pasado 25 de marzo en Waco, Texas. La fecha coincide con el 30 aniversario del asedio policial a la sede de los davidianos (una escisión de la Iglesia Adventista del Séptimo Día), que terminó con 4 agentes y 82 miembros de la secta muertos, entre ellos más de 20 niños. ¿Casualidad? Ni por asomo.
El líder de la secta, David Koresh, es considerado un mártir por la extrema derecha estadounidense; un símbolo de la libertad religiosa, del derecho a estar armado hasta los dientes y de la resistencia contra el gobierno “opresor”. Según estos, con QAnon y Alex Jones (famoso conspiracionista y proselitista de Trump) a la cabeza, los sucesos de Waco fueron una matanza orquestada en la sombra por el presidente Clinton y su esposa Hillary (esa señora maligna que trafica con niños en los sótanos de las pizzerías).
Tanto es así que, en 1995, el ex soldado Timothy McVeigh puso una bomba en un edificio gubernamental de Oklahoma en el que murieron 168 personas y hubo 680 heridos, el atentado más grave perpetrado en Estados Unidos hasta el 11-S. La principal motivación del terrorista fue vengar la “matanza” de Waco. La pregunta es: ¿cómo es posible que un fanático religioso, acusado de pederastia y violación, y que se creía un nuevo mesías, sea un héroe para millones de “buenos cristianos” y patriotas estadounidenses?
Stephan Talty, conocido por obras como ‘Garbo, el espía’ (Destino, 2013) o ‘La Mano Negra’ (Península, 2018), recorre en ‘Koresh. La verdadera historia de David Koresh y la tragedia de Waco’ el camino que va de la Texas de los años sesenta, el lugar donde creció -rodeado de armas, biblias y maltratadores alcohólicos- Vernon Howell (nombre real de David Koresh), hasta el Washington de 2021, cuando fue asaltado el Capitolio. Un esclarecedor viaje por un “suelo que han recorrido durante siglos hombres y mujeres que creen que la violencia purifica la tierra y la reemplaza por algo infinitamente más maravilloso”.
Basándose formalmente en el clásico ‘La canción del verdugo’ (Norman Mailer, 1979) y apoyándose en fuentes orales, en las transcripciones de las escuchas del FBI y en las informaciones de los medios de comunicación (el suceso fue televisado en directo, como se puede ver en la serie documental ‘Waco: El apocalipsis texano’, un estupendo complemento visual al libro), Talty ha construido un apasionante relato sobre el ascenso de Koresh como líder del culto davidiano (antes intentó ser una estrella del rock) y el dramático asalto a su sede, una actuación plagada de errores y desavenencias entre los distintos grupos operativos que desembocó en tragedia.
Biografía, crónica de sucesos, historia oral, ensayo sociológico sobre el auge de la derecha conspiranoica… El autor combina con gran habilidad todos estos géneros y temas para reconstruir la vida de una de las mentes criminales más perversas y fascinantes de la historia reciente de EEUU, el más joven de la diabólica trinidad de líderes sectarios formada por Charles Manson y Jim Jones. De hecho, el libro de Talty se puede ver como el ‘Helter Skelter’ de Koresh, un esqueje de la obra maestra del true crime (publicada también en la editorial Contra).