«¿Te gusta conducir?» era el eslogan de un famoso anuncio de coches que todo boomer recordará por la sensación de paz y libertad que transmitía. Una persona conducía en medio de un desierto -el típico desierto-, como si las ruedas pudieran ayudarla a escapar de su vida de mierda. Era un anuncio para intensas, y The Vaccines, intensas son un rato. Seguro que les habría gustado muchísimo ese spot a tenor de lo que ha inspirado uno de sus últimos singles, ‘Lunar Eclipse’.
Como ha narrado en DORK, durante un viaje por el desierto del Joshua Tree -dónde si no-, el líder Justin Young ideó esta canción, pensando en si al ir conduciendo por una carretera de este tipo, se fijaba más en lo que la carretera le traía (el futuro), o lo que veía por el espejo retrovisor (el pasado). «Mira lo que empezaste / ¿Es esto lo que querías? / Me trajiste al desierto / y me dejaste prendado», dice el estribillo de ‘Lunar Eclipse’. De ahí, la portada del álbum.
Y hay mejores sencillos en esa máquina de hacer sencillos que podemos considerar a The Vaccines. ‘Sometimes, I Swear’, sobre la necesidad de sentirte parte de algo, abre ‘Pick-Up Full of Pink Carnations’ de manera épica, con otro de sus grandes coros para el «sing along» («Sometimes, I swear / It feels like I don’t belong anywhere»). El último «focus track» ‘Discount De Kooning’ alterna un gacho que anima a «seguir bailando» con punteos de indie pop y referencias al pintor neerlandés.
Otros temas que han sido escogidos como single han sido ‘Love to Walk Away’, según ellos el que decidió la línea artística del disco (la de siempre o casi siempre), y ‘Heartbreak Kid‘. Frente a canciones que pasan más desapercibidas como la un tanto Peter Hook ‘Another Nightmare’, hay un «no single» que podría ser favorito de sus fans, ‘Sunkissed’.
The Vaccines se especializaron desde sus inicios en canciones pasionales, generacionales, románticas, y ‘Sunkissed’ es reminiscente melódica y temáticamente de pequeñas maravillas como ‘Post Break-Up Sex‘. Sobre todo al final cuando entran los teclados. «Estábamos tan enamorados que reservamos en el Hilton, me dejé barba para parecer Dennis Wilson», chilla Justin cual crooner-fucker empapado de nostalgia. Y ahí es cuando The Vaccines vuelven a convencerte. Como cuando vuelven a dar en la tele esa película retro llamada ‘Grease’ -retro como los coros surferos de ‘The Dreamer’- y vuelves a tragártela de buena gana. Aunque al día siguiente ya no te acuerdes de haberla visto.