El éxito viral de ‘Barras Warras’ y de sus colaboraciones con Julieta, The Tyets o Delgao han ido consolidando en el último año el proyecto musical de la otra hermana Farelo que está pudiendo dedicarse a la música. Irma, es decir, Mushkaa, publica ahora su primer referencia (más o menos) larga.
‘SexySensible’ no es un título tan “cool” como el de ‘CrazySexyCool’, pero Mushkaa lo utiliza para “unir” en un único proyecto “sus dos caras indisimulables” (sic). La parte “sexy” está representada por ejemplo en el reggaeton de ‘Señal de respeto’ (“ella es la más gata, me calienta la sangre”). La parte sensible concluye el disco con ‘Entre el fum’, una balada a piano.
Mushkaa está empezando y sobre todo se está descubriendo a sí misma en este primer disco que ha llegado a las plataformas incompleto, como el de Lola Indigo, pues la pista titular no está publicada. Tiene sentido por tanto que en ‘SexySensible’ juegue con diversos géneros, incluso atreviéndose con el synthwave en la pista titular, en realidad solo la “intro”, desafortunadamente.
El eclecticismo de ‘SexySensible’ es la mejor parte del disco. Las canciones tienen tablas. ‘Señal de respeto’ -con otra hermana Farelo, Greta- es una digna apuesta de baile reggaetonero. ‘El disfraz’ sorprende sonando amablemente disco y funky, como acordándose de ‘Say So’ de repente. Y, en una forma de medio tiempo de rap/R&B clásico, ‘Imperio’ es la composición más completa.
Es inevitable por tanto que en ‘SexySensible’ los beats se impongan a la propia presencia de Mushkaa en algunos casos. ‘Habibi’ no es la mejor canción llamada así salida en tiempos recientes, pero sabe poner el punto más contundente del disco incluso mezclándose con bachata. La favela funk de ‘Xarnega’ deja la mejor producción del elepé. Y aunque ‘Turra Malvada’ no es una cumbia tan moderna como la de Ralphie Choo, aporta otro interesante sabor al conjunto.
En ‘SexySensible’, Mushkaa abre más puertas que las que sugiere el título del disco. Abarcando estilos muchos más diversos de lo esperado, y sin el mal gusto de separar sus identidades en dos discos diferentes como hizo años atrás otra famosa hermana, el debut de Mushkaa suena a su tiempo y no olvida ni de rendir tributo al pasado, ni de instalarse en el hoy.