Hace un par de semanas se celebró San Valentín y como siempre subió el consumo de las canciones y playlists de amor. Muchas suponen promesas para toda la eternidad, como ‘I Will Always Love You’ o ‘Always Be My Baby’. Dedicamos el capítulo de esta semana de Revelación o Timo, el podcast de JENESAISPOP, a valorar cómo ha ido cambiando el mensaje de las canciones de amor a lo largo de las décadas. Cómo las canciones de amor han ido reflejando también nuestro modo de entender el amor. ¿Cuándo empezamos a hablar de amor tóxico en el mundo del pop?
Recordamos algunas de las canciones de amor con que hemos crecido. Muchas de ellas se enfocaban en la sensación de tristeza o de abandono (‘Nothing Compares 2-U’), otras se veían obligadas a sonar más grande que la vida (‘Como yo te amo’), a veces rozando lo creepy (‘Yo soy aquel’).
Frente a mensajes tan negativos como el de ‘Piensa en mí’ («cuando quieras quitarme la vida, no la quiero para nada») o a ya clásicos de las listas de canciones stalker como ‘Every Breath You Take’ de Police o ‘Hello’ de Adele, desde hace aproximadamente una década, estamos encontrando en las canciones pop otro tipo de mensajes.
‘New Rules’ de Dua Lipa sería un ejemplo palmario, con ese pre-estribillo en el que enumera consejos para huir de un amor tóxico. Artistas salidas en la última década como Lorde, Tove Lo, Lola Indigo o Belén Aguilera (sobre todo las femeninas, ¿verdad, Justin Timberlake?) están escribiendo canciones de amor muy distintas, con el foco en una misma y en la supervivencia propia. También Quevedo o Karol G y Becky G han cantado contra el amor tóxico pese al estigma de la música latina.
También empiezan a aparecer nuevas formas de amar, no normativas, como el poliamor, las relaciones abiertas o la importancia afectiva de los rollos de una noche. De esto último hablamos en los últimos minutos del podcast. Os recordamos que la semana que viene, el jueves 7 de marzo, os esperamos en la Sala El Sol de Madrid en la grabación de un podcast en directo. El tema será «el fenómeno fan». Podéis comprar vuestras entradas aquí.