La historia de Repion se ha contado muchas veces durante el último par de años. El padre de las hermanas Marina y Teresa Iñesta tocaba la guitarra. Una amiga les descubrió a Nirvana, a Soundgarden y «todo el grunge». Su madre, que escuchaba Radio 3, les ponía ‘Un día en el mundo’ de Vetusta Morla para ir a la playa cuando tenían 13 años. «Nuestra madre siempre fue indie» pudo haber sido el titular de esta entrevista.
Repion van ya por su cuarto álbum aunque es el segundo que afrontan en Mushroom Pillow, cada vez más profesionalizadas. Ayuda que compatibilicen su carrera como dúo con otros proyectos como Aiko El Grupo o Mikel Erentxun, o que colaboren con gente como La M.O.D.A. -nada menos que en la mejor canción de estos– pero sobre todo que sus canciones se hayan ido enmarcando en el pop-rock español de toda la vida.
Podemos hablar de la influencia del grunge, por supuesto; o más bien de algo parecido al post-grunge, aquellos grupos que desarrollaron su carrera en la segunda mitad de los 90 (Smashing Pumpkins, Veruca Salt). ‘X’ termina furiosa como una riot-grrrl, porque la persona destinataria no ha querido cambiar.
Pero es difícil ignorar el parecido con gente de aquí, hasta cierto punto relacionada con el underground anglo, como Christina y los Subterráneos, Tulsa o Tahúres Zurdos. Y eso es algo positivo, en primer lugar porque estoy diciendo que la voz de Marina -cantante principal- es muy bonita. Algo que el indie desconoció salvo honrosas excepciones. Y en segundo, porque grupos de revival grunge siguen llegando muchos de fuera, tanto en lo comercial como en un plano más underground. Pero no tantas formaciones nacionales han querido bucear en ese apasionante océano llamado «pop-rock español». Y en lo que tiene de universal cuando está bien hecho.
Las composiciones de Repion suelen hablar de desencuentros y malentendidos: un sueño por el que apostamos pero solo «dura una semana». Un momento en el que tenemos que «contener un ataque de ira». ‘Otro día será’ puede ser su mejor canción, empapada de cotidianidad, realzada por un solo de guitarra eléctrica. ‘Cerrar los ojos’, tras abrir a piano, se eleva con frases tan coreables como «no aguanto ver esto» o «siento una pena tremenda». ‘Me sabe a poco’, con la repetición de ese «tú no lo tienes tan claro». Y ‘El sueño dura una semana‘ ha sido por ahora el gran single del álbum gracias a ese momento en que vuela, y luego recula para repetir «no sabía que venías los miércoles».
El álbum, que concentra casi todos sus singles en la primera mitad, se cierra sin mayor sorpresa que ese tema acústico llamado ‘Atocha’, en el que alguien arrastra una maleta penosamente hasta la famosa estación madrileña. Una escena que, durante solo 1 minuto y 30 segundos, removerá a más de uno. Pero también se cierra ‘201’ sin tiempo para cansarte de Repion. El grupo no ha dado oportunidad en estos 10 temas y 30 minutos de música. Hay un claro resurgimiento de las guitarras en España y el dúo merece estar en primera línea.