Mirad, en plan salomónico diré que creo que ambos tenéis razón.
Es evidente que un liberalismo llevado a ultranza impide la igualdad plena de los ciudadanos de un país, especialmente los más débiles, que sin un Estado protector se ven privados del derecho a la salud, a la vivienda, a la educación... Esto no se puede negar. Pero ese estado "desigual", por supuesto, no obstaculiza la plena consecución de los derechos y deberes democráticos: libertad de expresión, de voto, de reunión, etc.
Diría que habéis mezclado una cosa con la otra, que sí tienen que ver pero no están ligadas. Comparad el EE.UU. de los 80 con la Suecia de los 80: ambos difrutan de los mismos derechos democráticos, pero difieren sustancialmente en el disfrute de los derechos sociales.
Creo que Chaves sí atendió las necesidades primarias de su pueblo pero descuidó otros aspectos de la salud democrática de su régimen.