Esta basada en un best seller que utiliza como trasfondo un hecho histórico, el acuerdo de Munich, para construir una trama ficticia de espionaje de las de toda la vida. Le cuesta un poco arrancar, algunos personajes no tienen mucha entidad (especialmente el de George McKay) y a veces con tal de generar tensión se saca de la manga algunas situaciones y resoluciones un poco forzadas. Pero como thriller funciona, tiene nervio y las dos horas se pasan rápido. Me ha parecido curioso y un punto original que trata de empatizar o comprender un poco al personaje de Chamberlain, el primer ministro británico previo a Churchill, que históricamente siempre ha sido muy cuestionado.
Y bueno, que mi Jannis Apellido Impronunciable dé el salto al cine internacional siempre es bien, que soy fans.