Como bien habeis dicho, As bestas es maravilla. Es verdad que el hiato melodramático madre-hija está un poquito estirado de más, pero luego la peli remonta. Y sí, los actores están de fábula, especialmente Luis Zahera: el Goya a actor de reparto lleva su nombre. Qué prodigio de naturalidad, realismo y carisma.