El stop motion de esta peli está muy por encima del de cualquier otro que haya visto. Es una pasada, sobre todo en la cantidad de detalles. Eso sí, la historia es triste hasta decir basta pero destila mucho humor negro y mala leche, lo que la hace más llevadera. Ojala se lleve el Oscar. Ah, y Nick Cave pone su voz a un personaje secundario