Me he dejado en el ipod cargando en el trabajo, cuando he llamado para que me lo guarden, mi encargada me ha dicho que no piensa guardármelo y que eso de cargarlo en el trabajo equivale a robar. Estaba a punto de volver a casa y he tenido que volver sobre mis pasos. Al entrar, suerte que no me la he cruzado, que si no la arrastro de los cuatro pelos que tiene mal puestos.