-Me uno a lo de lavarme los dientes demasiadas veces al día (y dicen que es peor, pero si no me los lavo me da muchísimo asco, tanto que me impide concentrarme en otra cosa).
-Siguiendo con el de antes, no puedo evitar mirar los dientes de las personas. Una sonrisa no profident (rollo dientes amarillos o manchados, o bocas tiburonescas me dan mucha grima y no puedo dejar de mirarlas).
-Tampoco puedo llevar anillos, collares, pulseras o pendientes.
-Lo de cerrar las puertas de casa/trabajo ya es obsesión aparte. Soy capaz de dar media vuelta aunque pierda 20 minutos si con eso me quedo más tranquilo.
-Contar cada semana/dos el dinero que tengo debajo del colchón, y apuntarlo cuando añado/quito aunque sean 20€.