Lo mío es la cerveza, luego la cerverza y por último, la cerveza (*). Cuando ya me he cansado de cerveza, y despues de pedirme otra cerveza, me paso al gintonic en horas vespertinas (beefeter con scwheppes y corteza de limón; nada de ensalada, bayas o especias, please), o al whiski-cola si ya es de madrugada.
(*) Los domingos a mediodía, no se por qué, cambio la cerveza por el vermú.