Verano. Vacaciones del colegio. Estoy moneando con mis amig@s en el parque. Son las 19:45. Me voy corriendo a casa porque a las 20:00 empieza Buffy.
A parte de por ser, como serie, una auténtica obra maestra, Buffy es y será una serie de cabecera por el contexto tan nostálgico que tiene para mí. Ver una serie en la tele. Tener que esperar al día siguiente para ver otro capítulo! No saber lo que va a pasar a pesar de que en Estados Unidos vayan 3 termporadas adelantados! Eso era puro siglo XX, que, para bien o para mal, nunca volveremos a vivir.
Más que por el tema boller, para mí Buffy es una serie importantísima porque presenta personajes femeninos fuertes e independientes con una falta total de artificiosidad, tan tristemente común en las series americanas. La serie es un claro ejemplo de evolución, tanto de técnica como de personajes y medios. Ver el 1x01 y el 7x21 y marearte, pero que ambos sigan teniendo “ese” espíritu tan difícil de explicar a la gente no instruida en la materia.
Como los pisos con encanto, yo siempre hago la misma recomendación, “mejor ver”.
Me encantaría volver a ver la serie con un newbie a mi lado. Ver cómo se les ilumina la cara a medida que van descubriendo su grandeza NO TIENE PRECIO.