Ya, tiene buenas ideas, siempre es interesante el tema de lo que significa crecer y autoaceptarse en un entorno que espera de ti que seas heterosexual, y la estética está lograda, aunque a veces ahoga todo lo demás. No es ninguna obra maestra, pero vale la pena verla. Y aunque recuerda a Dolan, resulta más modesta (en el buen sentido) y menos irritante; en esta no dan ganas de abofetear a los protagonistas ni nada.