Pues por fin llegó el día, conocí a @Me_Adri y vi (por cuarta cez) a Lady Gaga.
Conseguí llegar al concierto sin haber visto (apenas) nada de la gira, por lo que no conocía la temática del concierto ni había visto nada del montaje ni vestuario (sí lo de la jaula del openning porque piqué y vi la actuación de los MTV, que era, en realidad, desde su concierto de Nueva York, y para cuando me di cuenta ya era tarde y me había autoespoileado sin saberlo).
Dicho esto, y siendo que tengo la suerte de poder comparar con algunas de sus otras giras, creo que Lady Gaga está en su mejor momento. Es el concierto en el que la he visto más contenta, más serena, más feliz y más disfrutona. Atrás quedan los conciertos que parecían una terapia colectiva.
A favor del concierto, creo que el setlist está muy equilibrado entre hits y canciones de Mayhem, que se integran a la perfección con su repertorio anterior (menos The Beast, que me sobra en el disco y me sobra en el concierto). Incluso Dead Dance encaja muy bien en el mundo Mayhem.
Además, aunque hay poca escenografía material, los visuales de la pantalla superior son magníficos y muy elaborados, hasta el punto de parecer estar viendo un vídeo editado para su publicación.
A lo largo del concierto hay grandes momentos. El primer bloque es tremendo, enérgico y de subidón. El montaje de poker face es muy chulo. Milion Reasons con la capa es fabuloso. El número de Just Dance con todo el cuerpo de baile (cuántos eran??? 5000?) bajo la línea de focos es "simple" pero muy efectista. Dead Dance es mil veces mejor con el montaje del concierto que el videoclip de Tim Burton. La parte acústica, en este caso con TEOG y Joanne (que me emocionó especialmente hasta el punto de derramar alguna lágrima). El primer final con Bad Romance, brutal y el segundo final con How bad do you want me desde el camerino.
Por contra, si bien, a poco que conozcas a Gaga, conoces sus luces pero también sus sombras, está bien el planteamiento de "todos mis yo" o "yo puedo llegar a ser mi peor enemiga" pero creo que le falta una vuelta a la narrativa. El concepto de presentar una ópera me parece algo pretencioso y a ratos, le resta más que la suma.
Lo mismo ocurre con los interludios. Obviamente, deben estar porque esta gente necesita cambiarse, coger aire y respirar en algún momento, pero en esta ocasión se hacen largos (especialmente el del fuego) y todos sabemos que puede haber interludios excelentes.
En cualquier caso, lo disfruté mucho y, ahora sí, llevo mirando vídeos y reseñas en redes que no he visto durante los últimos meses para repasar los mejores momentos.