El drama de las filipinas es real. En Madrid vienen todas a través de un señor que no recuerdo el nombre que es como el dealer de la agencia (fue uno de los temas en la comida de navidad de mi departamento y es tan horrible como suena). Todas llegan, les dan un curso para que sepan organizarse y todas te llaman señora y hablan en inglés que es uno de los motivos por los que las contratan (además de porque tienen muy buen mano con los niños).
Una compañera de trabajo está ahora en la fase previa a la de Carla, tiene que volver la cuidadora de Filipinas la semana que viene y está panicando porque encontrar a alguien que se quede con tus hijos no es tan fácil.
Dicho todo esto, esta pajarraca pues eso, cero sorpresas que la tenga en el móvil así guardada y que no quiera contarlo en el avión pero sí a millones de personas...me parece de súper mal gusto publicar los mensajes y tener que hablar de ello públicamente de ese modo.