Yo lo siento, de veras, porque creo que no me ha pasado nunca algo así con nadie en el foro. Pero es que no te aguanto. Es ver tu nombre y darme ganas de apagar el ordenador.
Al principio lo intenté, en serio, te di conversación y todo, pero llegó un punto en que leerte daba más pereza que cualquier otra cosa, y por ahí ya sí que no.
Entiendo incluso que le puedas caer bien a algunas personas, puesto que vas de falsa víctima y te nutres de aparentes buenos modales.
Voy a poner un ejemplo. Un día estaba malo, con fiebre, y discutimos por aquí (te llamé payaso). Tras la discusión lo primero que hiciste fue desearme que me mejorara en el hilo de estar enfermo. Lo que para cualquiera puede significar un signo de buena educación y de conciliación, a mi me parece falso, antinatural y me da mal rollo. Me recuerda a cierto personaje que abandonó el foro, que buscaba siempre agradar a los demás de cara al público, pero que soltaba veneno allá donde pisase.
Y ya está, no pensaba dirigirme a ti más pero tenía que soltar todo esto aprovechando que ha salido el tema.