Nadie está en un mewafestival como en el comedor de su casa. Pretender eso es una quimera de las más absurdas y de las más caras que se me ocurren. Ahora, siempre se pueden optimizar los recursos dependiendo de las ganas.
Yo ya tengo una edad que el cuerpo manda. Si son las 3:45am y el grupo que suena en el escenario San Miguel no me da la vida, lo veo el césped tan tranquilamente. Y si me molan mollogón, intento verlo entre las primeras 20 filas.
Cada concierto es diferente, y no todos los veo con la misma actitud. No me doy codazos con nadie por estar el primero, esa fase ya pasó; ni veo nada desde 3 kms de la pantalla porque para eso me quedo igual. Ya no espero a ver si viene fulanito o menganito que ha ido a por birra y tarda 20 minutos. Y si te toca al hooligan al lado, te mueves y tan tranquilos.
Superado todo esto, en un cierto punto, y con un poco de suerte tuya y de los señores que están en el escenario, la música simplemente fluye. Con eso me doy por compensado.