El portal de la casa de mis abuelos en el pueblo.
Está justo a las afueras y se ve campo llano y montes al fondo. Me recuerda a las noche de verano, cuando mi abuela hacÃa pipirrana para cenar y después nos salÃamos "a tomar el fresco", con las lagartijas recorriendo las paredes, los gritos de los chiquillos y el resto de viejitos en sus portales.
Ahora cada vez que entro se me vienen mil recuerdos a lo Cien años de soledad. Y ya paro, porque se me está saltando la lagrimita 😞