Medúlla tiene grandes aciertos, claro, pero en mi opinión es demasiado denso. Todo lo que en Vespertine es cristalino y delicado, en su disco siguiente se vuelve oscuro y espeso. No entendí bien el cambio, me pareció un proceso de "reconcentrado" innecesario. Bien es verdad que hace mucho que no lo escucho, igual ahora me sorprende.
Volta lo salvo de la quema general, pero vamos, ni de coña llega a las cotas creativas de sus mejores años. Y luego ya Biophilia, que tiene dos o tres temas y para de contar.
Habrá que ver por dónde sale ahora, pero lo cierto es que quien tuvo retuvo, y cualquier disco menor de Björk se caga y se mea en gran cantidad de la morralla contemporánea que hay por ahí.