Esa casa es un matriarcado y lo que domina son los vestidores llenos de ropa y tacones y los baños llenos de cosméticos y maquillaje. Vivir en casa rodeado de una madre pirada, cinco hermanas a cada cual más loca y un padrastro con el que te llevas a medias tampoco debe de ser fácil.
Por mucho que se apoye en Khloe, el vínculo entre las tres mayores por una parte y las dos pequeñas por otra, Rob no lo tiene. Además, por sus salidas de tono y reacciones, da la sensación de no estar del todo bien.