A mí si ella no fuera tan payasa a todas horas me podría llegar a gustar. Me sorprendió mucho con Emancipation y luego la oyes hablar o interactuar con los fans y no es tan tan pava y puede incluso ser divertida. Pero las actuaciones con esas pintas que me lleva, el empacho de arco iris y mariposas, la obsesión por la balada ñoña... me satura.
Make it look good del último disco es buenísima por ejemplo y tampoco le presté mucha atención la primera vez que escuché el disco, quizá por el cinismo que me provoca el personaje de Mariah.