Bueno, la final ha sido emocionante al estar bastante abierta y la gala menos encorsetada, a pesar de los momentos de Ruth Lorenzo hablando en inglés con el jurado (¿qué le importa a nadie? ¿No sería mejor invertir ese tiempo en algún sketch o algo mínimamente divertido?).
Al final el orden de salida creo que sí influía un poco, ya que las dos favoritas salían primera y última, y es verdad que a la quinta canción se te había olvidado un poco la de Daniela.
Cuando ha llegado Melody, habiendo criticado como he criticado la canción (desfasada a más no poder) y la puesta en escena (barroca y hasta agobiante), algo me ha dicho que iba a ganar, porque veías a una artista comiéndose el escenario entre mucho intento de. Me alegro por ella porque creo que era su última bala, me ha dado ternura verla tan emocionada. Aparte, viene sin discográfica, demasiado ha hecho. Ahora bien, que la coja con urgencia un escenógrafo y le dé una vuelta a todo para que sea un poco más fino, que sabemos que quiere ir de Gloria Trevi pero hay tanto que pulir… Creo que así puede intentar no ir directa al bottom 5.
El problema está en lo que llevo repitiendo desde que se anunciaron los artistas y después las canciones. Que sí, esto está a años luz de Objetivo Eurovisión y nos han dado tres noches con actuaciones resultonas y algunas más potentes, pero faltaba lo más importante: una canción con posibilidades de ganar el ESC. No la había. Me preocupa que el nivel siga bajando, que ningún tema tenga opciones comerciales más allá del Benidorm. Esto no debería estar pensado exclusivamente para eurofans y para cumplir con el lo que se espera del cliché eurovisivo, sino como un festival de la canción española con mayor representación de géneros y de artistas con cierto nivel. Pero parece que MEC y quien lleve esto no quieren calentarse el gorro. Por cierto, la actuación de Rigoberta bastante icónica la verdad.