La revista tiene lo suyo. Son casi 300 páginas con fotografías hechas por profesionales en todas y cada una de ellas, tiene muchas entrevistas y mil cosas más además de cero publicidad. Una revista cualquiera, pongamos la GQ, cuesta 3'50 porque tiene en al menos un tercio de las páginas publicidad. Las empresas que ponen esa publicidad pagan en parte lo que cuesta en realidad la revista: fotógrafos, caché de los entrevistados, escritores, editores... Que cuestan lo suyo. Sin la publicidad, la GQ costaría bastante, bastante más. 80 me parece desorbitado, pero creo que de unos 40 no bajaría.
Y lo que han dicho, es algo complementario. Para disfrutar Blonde y Endless no son necesarios ni la revista, ni los pósters, ni la camiseta, ni mucho menos el ambientador. ¿Quieres leer la revista? Hay pdfs por toda la red. No es lo mismo, pero no tienes que pagar 80 dólares.