Después de oírlo una vez, me gusta muchísimo. Lo que me transmite el disco me recuerda a lo que me transmitía al principio el disco de London Grammar, que ha acabado siendo uno de mis favoritos.
Sí es verdad que se hace un poco largo, pero siempre encuentras un detalle que te enganche o una razón para no pasar de canción. También es cierto que no hay un Voyeur, pero siendo casi todo tan precioso como es, yo creo que no lo necesito (aunque ojalá vaya alguna vez más por esos derroteros).
Mi opinión es que con el tiempo el disco irá conquistando a casi todos los escépticos.
PD. La portada es maravillosa, no puede gustarme más.