No sé si habeis hablado por aquí de Maid (La asistenta).
Me queda un capítulo aún, pero desde ya es de lo mejorcito que he visto este año.
Te deja baldado por momentos, la protagonista está enorme y la historia se cuenta con mucha sensibilidad. Muestra la cara áspera del espejismo americano de la meritocracia, como nos aprovechamos de la vulnerabilidad ajena y el uso del poder en las relaciones.