Más madera para la autoedición

Después de Wilco, la canción, el disco, el festival o incluso el café, llega Wilco, el sello. Más o menos. El grupo va a pasar a editar todos sus álbumes y otros lanzamientos a través de su propia discográfica, que han llamado dBpm. La banda abandona de esta manera Nonesuch Records, como se dejó caer el pasado mes de julio, y a partir de ahora han llegado a un acuerdo para que ANTI- Records distribuya su próximo disco, que ya graban. En España es PIAS quien se encargará de llevarlo a las tiendas y ha emitido a la prensa el comunicado. «El carácter independiente de Wilco ha quedado demostrado y no es ninguna novedad. Esto es la culminación de nuestro trabajo durante los últimos 15 años. A medida que llegábamos al fin de nuestro acuerdo, parecía más claro que era el momento de cambiar. Una cosa de la que estábamos seguros es de que no queríamos firmar otro acuerdo de grabación tradicional».


Que un grupo de éxito funde su propio sello no es ninguna novedad. Los Rolling formaron Rolling Stones Records en 1970 para editar sus álbumes en solitario, entre otras cosas, y el sello mantuvo su actividad hasta 1992. También Madonna fundó Maverick dentro de Warner, fichando a gente como Alanis Morissette o The Prodigy para Estados Unidos. Pero la autoedición adquiere claramente un nuevo significado en el nuevo siglo. Los grupos que están consolidados, léase Radiohead, ya no necesitan a los grandes sellos para publicar su música. Los días en que las discográficas pagaban millonadas por grabar y promocionar sus discos se han acabado y de hecho ya son muchos los grupos que graban sus discos en sus estudios y después la discográfica simplemente los distribuye.

La novedad es que verdaderos talentos consolidados están abandonando grandes compañías. Quizá porque si el grupo es de sobra conocido y tiene una base sólida de fans, es raro que el sello pueda hacer mucho más por promocionarlo que el artista a través de su site, sus vídeos, su Twitter y… sus canciones. ¿Qué mejor promoción tienen OK Go que los vídeos que ellos deciden hacer (a veces sin presupuesto)? ¿De qué manera ingeniosa puede vender una compañía un disco de Radiohead que sobre todo se sostiene por lo que es?

OK Go abandonaban EMI para crear su propio sello. Amaral, que ya llevan un par de discos autoeditándose (EMI sólo los distribuía, ellos en realidad habían firmado en su momento con Virgin), buscan ahora una discográfica, probablemente independiente, para que les distribuya. Y de manera sonada Radiohead llevaron ‘In Rainbows’ al número 1 en varios países después de conseguir una distribuidora y haber grabado y regalado (a la voluntad) el disco a los internautas por su cuenta tres meses antes.

Recientemente entrevistábamos a Fan Death y el grupo se mostraba muy crítico con la industria. Fueron fichados por una multinacional cuando comenzaron a aparecer en varias páginas de internet, pero a día de hoy su sello no ha publicado el disco en el propio país del grupo (Canadá) ni prácticamente en ningún lugar del mundo. El titular que nos daban (entrevista a publicar próximamente) es claro: «Recomendamos a los grupos que no fichen por ningún sello».

En España, un nuevo modelo de mitad sello de autoedición, mitad promotora de conciertos, nacía el año pasado con el nombre de Marxophone, teniendo en sus filas a gente como Nacho Vegas, Fernando Alfaro o Refree. Christina Rosenvinge también ansía formar parte de él en el futuro. Por no hablar de la cantidad de grupos que publican su material sin nada detrás, como Mittens o Thee Brandy Hips.

Sólo se necesita una buena distribución, y Wilco, que ya están escaldados de la industria después de haber tenido que autoeditar su obra maestra porque al sello no le gustó, están encantados: «Trabajar con ANTI-, un sello que tiene sus raíces en un chico fan del punk-rock que vendía sus propios discos es lo perfecto para nosotros».

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Publicado por
JNSP