‘Los vengadores’: el dream team de Marvel

-

- Publicidad -

‘Los vengadores’: el dream team de Marvel

En 2008 ‘Iron Man’ llegó a las pantallas de todo el mundo. Del éxito o el fracaso de esta adaptación dependía toda una línea de trabajo proyectada por Marvel: la realización de varias películas con otros superhéroes que culminaría con la reunión de todos en ‘Los vengadores’. Afortunadamente ‘Iron Man’ salió bien: fue un estupendo blockbuster y un gran éxito. Luego llegaron (y mantuvieron el nivel) ‘Iron Man 2’ (2010), ‘Thor’ (2011) y ‘Capitán América: El primer Vengador’ (2011). ‘El increíble Hulk’ (2008), sin embargo, fue el gran patinazo de la saga.

‘Los vengadores’ reúne a cuatro de sus personajes-franquicia: Iron Man, el Capitán América, Thor y Hulk, a los que se suman la Viuda Negra (que aparecía en la secuela de ‘Iron Man’) y Ojo de Halcón (visto en ‘Thor’). Todos ellos bajo la atenta y tuerta mirada de Nick Furia, el director de SHIELD. Todo un dream team súper heroico en el que, a pesar del esfuerzo por “repartir responsabilidades”, acaban destacando dos de ellos: Hulk, con más presencia y personalidad como secundario que en las dos películas que ha protagonizado, y, sobre todo, Iron Man.

- Publicidad -

Y es que Tony Stark lo tiene todo: las mejores y más divertidas líneas de diálogo, las secuencias de acción más trascendentes y emotivas y, por supuesto, al mejor actor: un Robert Downey Jr. pletórico. Gracias a su protagonismo, ‘Los vengadores’ tiene un ingrediente que le sitúa por encima del habitual blockbuster cacharrero: el humor. A diferencia de personajes más “envejecidos” como Thor o el Capitán América, Iron Man es el depositario de una sensibilidad contemporánea caracterizada por la ironía y el cinismo. Joss Whedon, famoso por series como ‘Firefly’ o ‘Buffy, la cazavampiros’, articula su adaptación a partir de la mirada resabiada de Tony Stark, dejando que poco a poco, tanto él como el espectador, se entreguen a los valores anacrónicos de los superhéroes de otras épocas.

‘Los vengadores’, a pesar de que le sobran minutos (sobre todo en el eterno ataque al portaviones) y le faltan malos carismáticos (Loki no da el tipo), aúna con brillantez humor inteligente y acción potente. Gags tronchantes combinados con espectaculares combates donde hay sitio para uno de los planos-secuencia más memorables de los últimos tiempos: la unificación espiritual del grupo en medio de la batalla. 8.

Lo más visto

No te pierdas