En ese sentido, la Asociación de Críticos de Música -organización cuya existencia acaba de nacer en mi cabeza- y yo mismo, deberíamos entonar el «mea culpa» por no haber sabido transmitir las virtudes de Lissie en general y de su anterior trabajo, ‘Back to Forever’, en particular. Como Esperanza Aguirre puede que no tengamos responsabilidad directa pero sí indirecta.
Mi compañero Sebas E. Alonso afirmó que ‘Back to Forever’ contenía 3 de las mejores canciones del 2013. Han pasado dos años y no sólo puedo decir que no exageraba sino que, muy a mi pesar, se quedó corto. ‘Sleepwalking’, ‘The Habit’ y ‘Further Away (Romance Police)’ deberían haberse convertido en hits a nivel mundial. Éxitos incontestables aptos para todos los públicos, muestra de lo que la industria era capaz en los años 70, 80 y 90. Hablo de canciones como ‘Go Your Own Way’, que la propia Lissie versionó, ‘Show Me Heaven’, ‘Let the River Run’ o ‘Take My Breath Away’. Temas con los que puedes hacer un «sing along» con tus padres, hermanos, amigos sin temor a que alguien no los conozca.
Lamentablemente ninguna de esas tres piedras angulares del AOR se encuentran siquiera entre lo más escuchado de Lissie en Spotify, dando lugar a uno de los mayores WTF de la historia de la música reciente.
En ‘My Wild West’ Elisabeth Corrin Maurus lo vuelve a intentar editándose ella misma a través de su sello, conocedora quizá de que si no lo consiguió antes, no está en su destino convertirse en una estrella del pop. Lo deja bien claro en ‘Hollywood’: «Maybe it’s time that I was leaving / I got a long way to go / I’m through with all that make-believing / Getting blood from a stone / Should’ve already known». Sigue insistiendo en la misma idea en ‘Wild West’, otra maravilla de canción marca de la casa, en la que canta: «Slip and fall if I take one more step / There’s safety in numbers, I guess… From where I stand / There’s a world where you can / All that you lost, you get back / And all that you want, you can have».
Desde donde está Lissie puedes recuperar todo lo que has perdido y obtener todo lo que quieras. Toda esa capacidad de atención que antes le dedicábamos a los discos y que ahora, saturados con tanta novedad, apenas tenemos. Se busca el hit, se busca rápido y si no lo vemos echamos mano de las etiquetas con apenas una escucha. A Lissie la han metido en el saco de Sheryl Crow o de «música para ‘Anatomía de Grey'» sin que nadie pueda decir por qué. Pero nada más lejos de la realidad. Ya quisiera Sheryl ser capaz de componer y arreglar una canción como ‘Sun Keeps Risin». La imagen que evoca el piano, los coros, el lamento de la guitarra eléctrica y la calidad interpretativa de Lissie la emparentan más con ‘Long Gone Before Daylight‘ que con ‘Tuesday Night Music Club’. Lo mismo se puede decir de ‘Together or Apart’ o ‘Stay’.
Puede que los tiempos no sean propicios para discos como ‘My Wild West’, que la nula presencia de la música en las televisiones o la deleznable programación radiofónica no favorezca la difusión de cierto tipo de artistas o que en la prensa musical estemos más pendientes de las peleas en Twitter que de lo que de verdad importa, pero ninguna de estas circunstancias es achacable a Lissie.
Es posible también que ‘My Wild West’ no tenga tres canciones tan sobresalientes como las de ‘Back To Forever’ pero a cambio tenemos un LP mucho más sólido en el que ningún tema baja del notable -salvo ‘Sun Keeps Risin» que es perfecta- y ante el que es imposible no maravillarse. ‘Don’t You Give Up On Me’ en boca de Adele se convertiría en multiplatino: es un hecho.
Nota: 8/10
Lo mejor: ‘My Wild West’, ‘Sun Keeps Rising», ‘Don’t You Give Up On Me’ y ‘Hollywood’.
Te gustará si te gusta: Fleetwood Mac, The Cardigans, Maria McKee y Carly Simon.
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Escúchalo: Spotify