Quería empezar la entrevista haciéndoos una pregunta bastante tonta sobre la referencia a las «chicas de Barcelona» en ‘FloriDada’. También habláis de chicos de Osaka, o de Ghana y Tijuana, y por supuesto de Florida. ¿A qué se debe la referencia a las chicas de Barcelona? ¿Os atraen especialmente o es simplemente porque la palabra rima con el resto?
El concepto de la canción está relacionado con la conexión y unión entre la gente, algo que se traduce en su formato de composición pop clásica. ‘California Girls’ de los Beach Boys decía «aquí, estas chicas son así; allá, estas chicas son así», y ‘Floridada’ es justo lo contrario, se pregunta qué es lo que hace que esta gente se una. De todas formas, no pensamos mucho la letra. Supongo que al público de Barcelona le hará gracia escuchar esta canción, aunque cada vez que voy al Primavera solo oigo a ingleses.
«Cuando tocamos, me paseo por el festival de vez en cuando, y siempre se oye solo a gente inglesa o alemana»
¿Has ido al Primavera Sound de público?
No de público, pero cuando tocamos, me paseo por el festival de vez en cuando, y siempre se oye solo a gente inglesa o alemana.
Hablando de países, estrenasteis ‘FloriDada’ en el aeropuerto de Baltimore el día previo a Acción de Gracias. Es curioso lo de que vuestra música suene en un lugar puramente de transición. ¿Lo veis como una metáfora de vuestra carrera?
No había ninguna idea metafórica tras el estreno del disco en un aeropuerto. Probablemente la idea se nos ocurrió después. Para mí, tiene sentido hacer esto porque, por ejemplo en ‘Floridada’, hemos intentado hacer un «collage» universal. No se me había ocurrido la idea de transición y movimiento constante como metáfora de nuestra carrera, pero ahora que lo dices, tiene sentido.
Hablando de «collages», el arte visual de ‘Painting With’ parece muy importante esta vez, empezando por el mismo título del disco, o el hecho de que habéis hecho tres portadas en lugar de una sola. Además, ‘FloriDada’ contiene un guiño al dadaísmo. ¿Qué elementos propios de este movimiento percibís en el álbum?
No es una referencia profunda. Durante el proceso de composición de ‘FloriDada’, notamos que podía haber algún tipo de referencia a algún estilo de arte como el dadaísmo. En realidad, siempre hemos trabajado con «collages» y samples en nuestra música, pero desde un punto de vista más impresionista, por lo que esta vez ya no nos resultaba un reto, así que decidimos hacerlo de otra manera, esto es, coger los samples y empastarlos en medio de una canción, o deconstruirla del todo. Esta ruptura con las ideas con las que siempre habíamos trabajado nos pareció bastante dadaísta. De ahí la referencia en el título de ‘FloriDada’. En cuanto a la composición, Noah hablaba más de cubismo, pero son solo ideas básicas. Escribíamos canciones pop pero no en el formato tradicional de «estrofa – estribillo – estrofa – puente» sino desde una perspectiva distinta de cambiar «esto y lo otro» para verlas desde otras dimensiones. Semanas después, hablamos sobre pinturas y arte visual, pero es algo que surgió de manera natural. La temática del álbum fue algo que no anticipamos.
De hecho, tengo entendido que en el disco hay una colaboración de John Cale de Velvet Underground, pero no es demasiado obvia, quizás por todo este tema de la ruptura con las ideas convencionales.
La colaboración con John Cale surgió porque mi parte en ‘Hocus Pocus’, que era un trozo de un instrumento de cuerda turco tocado en un teclado MIDI, no pegaba con el resto de la canción. El modo en que grabamos aquel trozo no encajaba porque la canción era muy orgánica, así que necesitábamos un instrumento real. No quisimos contratar a un violinista porque queríamos a alguien que entendiera los tonos metálicos con armónicos que queríamos para la canción, por lo que llamamos a la hermana de Dave [Portner], que trabaja con John Cale, para que le preguntara si quería colaborar con nosotros. Y dijo que sí. De hecho, Cale está en el mismo sello que nosotros, Domino, pero el sello no tenía ni idea de que estábamos trabajando con él. Simplemente acudimos a la hermana de Dave y Cale aceptó.
¿Es Cale fan vuestro?
Sí. Eso nos motivó a preguntar al principio. Pero terminamos sin usar su parte. Simplemente, toqué mi parte otra vez al piano.
El videoclip de ‘Floridada’ es una locura. Además, contiene una advertencia para epilépticos. ¿Cómo surgió la idea de este vídeo?
Los chicos de PFFR han hecho un montón de cosas en Estados Unidos que nos encantan. De hecho, hemos intentado hacer un vídeo con ellos desde los tiempos de ‘Strawberry Jam’ pero nunca ha podido ser. Siempre que hacemos un disco nuevo les preguntamos si quieren colaborar con nosotros y esta vez ha habido suerte. Les explicamos que la canción no iba sobre Florida sino sobre el concepto de unicidad. Ellos nos comentaron que trabajarían en torno a la idea de que hay dos voces muy distintivas en Animal Collective -Dave y Noah- e hicieron dos vídeos en lugar de uno, el primero sobre el nacimiento del niño y la idea de que todos provenimos del mismo lugar, independientemente de donde terminemos viviendo después, y el segundo sobre algo más amplio, sobre la idea de que todos no ocupamos más que un espacio ínfimo en el universo. Y entonces juntaron ambas partes.
Aparte de eso, grabasteis el disco con documentales sobre dinosaurios de fondo, os inspirasteis en las pinturas rupestres… Además, el álbum tiene ritmos muy marcados, es muy bailable por momentos, y las canciones son muy rítmicas y directas. Se podría decir que habéis hecho vuestro disco más físico. ¿Era esa la intención?
Creo que los discos anteriores eran más físicos en cuanto a su interpretación. No veo este disco tan bailable pero eso es porque lo hemos escrito nosotros. No me resulta tan físico quizás porque todavía no lo hemos tocado en directo, pero en cuanto a la experiencia auditiva, tienes razón, pues quisimos que los ritmos fueran más pesados y primitivos y que la gente se sintiese motivada. En ese sentido, estoy de acuerdo en que es un disco muy físico.
De hecho, al contrario que vuestros discos anteriores, no habéis tocado nada de este trabajo en directo aún. ¿Cómo van los ensayos? Porque las melodías vocales son muy rápidas, por ejemplo.
Yo porque no canto, pero para Dave y Noah debe ser muy difícil. Los ensayos van bien de momento, tenemos a un batería que tocará en vivo, de modo que el directo será más humano y parecerá menos programado y electrónico, pero todavía queda trabajo por hacer.
Supongo que incorporaréis temas viejos al repertorio. ¿Los arreglaréis de modo que encajen con los nuevos?
Hemos escogido canciones que ya encajaban de todas formas. ¿Cuáles eran? No me acuerdo… Quizás un par sí las hemos cambiado un poco, quizás añadido alguna base que no estaba antes. Pero seguirán siendo reconocibles.
«Asumimos que nos harían muchas preguntas sobre los Beach Boys, pero está bien, es un poco lo que hacemos en verdad. Hay peores cosas con las que te pueden comparar»
Habéis grabado el disco en EastWest Studios, que es donde los Beach Boys grabaron ‘Pet Sounds’. Hace muchos años, sobre todo a partir de ‘Sung Tongs’, se os compara con ellos, pero este disco suena más Beach Boys que nunca. ¿Os cansan estas comparaciones?
No nos cansan, ya sabíamos que iba a pasar. En realidad, terminamos en aquel estudio en el último minuto porque nosotros reservamos otros dos pero al final no pudimos usarlos. Nos moló mucho grabar en un estudio tan importante, y después asumimos que nos harían muchas preguntas sobre los Beach Boys, pero está bien, es un poco lo que hacemos en verdad. Hay peores cosas con las que te pueden comparar. Además, ya estamos acostumbrados y nosotros admiramos enormemente a los Beach Boys. Tocamos con Brian Wilson dentro de unas semanas, es una gran coincidencia.
¿Crees que podréis verle actuar en el Primavera Sound?
En el Primavera Sound no sé, pero actuamos en un festival en Austin dentro de poco y Brian es el cabeza de cartel, pero como es mayor actúa antes que nosotros, que tocamos en el mismo escenario, así que podremos verle sin problemas. Normalmente, prefiero ver actuar a gente después de tocar en lugar de antes porque así nos podemos relajar un poquito.
¿En cuanto a las repetidas comparaciones con los Beach Boys, ¿hay alguna referencia musical en vuestra música que la gente no suele ver y de la que te gustaría que se hablara más?
Dave tocaba en una banda en los noventa de la que los críticos no suelen acordarse. Quizás menos gente de la que debería recuerda a aquel grupo. Por otro lado, escribiendo algunas de nuestras canciones siempre he percibido la influencia de Stereolab, banda de la que éramos muy fans en los noventa, mientras en algunas líneas de teclado oigo a Echo and the Bunnymen. También solíamos escuchar mucho ‘Seventeen Seconds’ de The Cure cuando íbamos al instituto. Pero no creo que ninguno de estos sonidos sea tan obvio en nuestra música.
«El saxofón siempre ha sido el gran odiado»
Dice Dave que odia el saxofón en la música rock, y que habéis usado esa aversión en ‘Painting With’ para retaros a vosotros mismos [NdE: en el álbum toca el saxofonista Colin Steston]. ¿Qué otras cosas que odiáis crees que podríais usar a modo de reto?
Es difícil de decir. El saxofón siempre ha sido el gran odiado. Para mí, probablemente coros de chica tradicionales en plan Rolling Stones… No es que no me gusten, simplemente creo que tener a tres chicas cantando coros en nuestras canciones, o que estas fueran algo más R&B y góspel, no pegaría con nosotros.
Debe ser difícil ponerse de acuerdo como banda, sobre todo cuando por separado hacéis cosas tan diferentes. ¿En qué cosas soléis estar de acuerdo y en cuáles no? ¿Ha sido fácil o difícil con este disco?
Cuando no estamos de acuerdo en algo, tratamos de encontrar una posición intermedia. Si siempre estuviéramos en desacuerdo no habríamos durado tanto. Solemos ser muy abiertos de mente con las ideas del resto y con probar cosas nuevas. La combinación de las distintas personalidades del grupo es lo que nos hace ser lo que somos. Con este hubo un par de desacuerdos mínimos, pero más allá de eso, ha sido muy fácil.
«En los últimos tiempos hemos sido más conscientes, no diría de nuestro legado, pero sí de nuestra historia, pues llevamos tocando más tiempo que algunas de nuestras bandas favoritas»
¿Escucháis vuestros discos viejos?
A veces, para acordarme de ellos o de lo que hacíamos en el pasado. Definitivamente, en los últimos tiempos hemos sido más conscientes, no diría de nuestro legado, pero sí de nuestra historia, pues llevamos tocando más tiempo que algunas de nuestras bandas favoritas. Suelen acercársenos bandas de chicos y chicas de 20 años con los que tocamos en festivales para decirnos que hemos sido una influencia para ellos. Hemos hecho un montón de discos que han significado cosas muy distintas para un montón de gente. Está muy bien sentir que has contribuido a la conversación.
Os escuché por primera vez en 2007, era un adolescente y para mí fue como descubrir el pop experimental por primera vez. En aquella época todo el mundo hablaba de ‘Strawberry Jam’, fue un clásico instantáneo.
Está muy bien oír eso. También mucha gente nos viene y dice que, a través de nosotros, ha descubierto a otras bandas anteriores. Para mí, es el mejor cumplido que me pueden hacer porque me hace sentir que estoy devolviendo el favor a las bandas que me han influido.
Este verano tocáis en el Primavera Sound. No sé si os habéis enterado de la polémica con las entradas: se agotaron en muy poco tiempo y mucha gente se ha quejado porque un gran número de las entradas vendidas provienen de otros países.
Recuerdo una polémica sobre el Primavera Sound. Hace unos años, tocamos en un festival justo después del Primavera, situado en una especie de castillo (NdE: quizá Fly Me To The Moon), organizado por el mismo promotor del Primavera, y este me contó que el Primavera es muy polémico porque muchos españoles no pueden permitirse ir al festival y mucha de la gente que viene lo hace de países más ricos. Entonces, se le ocurrió que, si tanta gente española no se podía permitir ir al Primavera, habría que hacer un festival nuevo más para la gente de España en el que tocaran algunas de las mismas bandas. Pero de esta nueva polémica, la verdad, no me he enterado…