‘Symphony’ contiene los ingredientes idóneos para triunfar: no, no es tropical sino puramente dance, pero tiene una melodía grande, casi eurovisiva, una base que se propulsa con naturalidad y cierto fondo deep house que añade sofisticación al conjunto. Y la orquesta, seña de identidad de Clean Bandit, se despliega al servicio de una Zara Larsson que se entrega vocalmente con especial buen hacer.
‘Rockabye’ ha sido número 1 en media Europa y ha calado incluso en España, pero también acaba de llegar al top 10 de Estados Unidos, una hazaña al alcance de no tantos artistas británicos: ahora mismo solo a mano de Ed Sheeran y Adele. De hecho, el tema no solo ha llegado al top 10 sino que ha alcanzado el top 9, superando el dato de ‘Rather Be’.
Precisamente hoy se publica ‘So Good’, el álbum debut de Zara Larsson, que incluye singles conocidos como ‘Ain’t My Fault’ o el tema titular. Tiene cierta gracia escuchar el disco de Larsson y recordar que la joven cantante, en realidad, es sueca y no americana y que su primer single, ‘Lush Life’, tenía más que ver más con Clean Bandit que con Rihanna, por lo que su colaboración en ‘Symphony’ resulta completamente natural.