El álbum fue escrito y grabado junto a la banda con la que lleva trabajando desde su último álbum, que incluye a ilustres como Debbie Googe (My Bloody Valentine, Snowpony) al bajo y Steve Shelley (Sonic Youth, Crucifucks) a la batería. Lo más sorprendente es la elección del productor que dirigió las sesiones de grabación en Londres: se trata de Paul Epworth, artífice del sonido que llevó al éxito de Adele y Florence + The Machine. Un trampolín que le llevó después a trabajar con U2, Coldplay o Paul McCartney.
Este nuevo álbum de Moore está muy inspirado en lo espiritual. Según la nota de prensa, “habla del amor entre los ángeles, del misticismo divino y de curación mediante el renacimiento. Inspirado por el amor radical y las energías de la desafiante madre naturaleza, la música está cargada de amor y de fuerza de acción positiva, donde lo masculino y lo femenino se unen de manera fluida en belleza y luz”. Hace unas semanas se reveló una canción titulada ‘Cease Fire’, bastante reminiscente del sonido Sonic Youth y con cierta carga social, con un mensaje anti-violencia. Sin embargo, esta canción finalmente no está entre los cinco cortes del álbum. Sí lo estará, en cambio, la más reposada ‘Smoke of Dreams’, una canción presentada hoy a través de un videoclip, que rememora sus días dorados en Nueva York, imaginando “una ciudad donde los espíritus inspiran a los artistas y a los amantes”.
Tracklist:
1. Exalted
2. Cusp
3. Turn On
4. Smoke of Dreams
5. Aphrodite