Manson ha actuado este domingo en San Bernardino en silla de ruedas, pero ha enfadado a mucha gente (como es costumbre) por otra cosa: el artista sacó un fusil de asalto falso (aparentemente un Kalashnikov) durante una canción y lo apuntó al público (puedes ver el vídeo en TMZ
). El músico ha sido criticado por su falta de empatía y tacto, ya que justo el mismo día de su concierto tenía lugar un tiroteo en una iglesia de Texas que mataba a 26 personas, el mes pasado se produjo otra matanza masiva en Las Vegas y en 2015 precisamente San Bernardino fue víctima de otro tiroteo en el que murieron 14 personas.El autor de ‘We’re from America’ ha asegurado disponer de aprobación policial para usar este arma de fuego falsa y ha defendido su actuación, asegurando que en ningún momento quiso ser “irrespetuoso” o “insensible” con la gente. “En una época en que los tiroteos masivos se han convertido en eventos casi diarios, mi actuación fue un acto teatral con el objetivo de exponer lo fácil que es conseguir armas semi-automáticas y cómo se ha normalizado verlas”, ha explicado. “Mi arte siempre ha sido una reacción a la cultura popular, y es mi forma de hacer pensar a la gente sobre las cosas horribles que pasan en el mundo”. Mientras, Donald Trump ha declarado en rueda de prensa que el problema de los tiroteos en Estados Unidos “no son las armas sino la salud mental”.