En un post (ya borrado) de Instagram recogido por Billboard, Minaj explicaba que el recinto de su concierto en Bratislava no contaba con la “capacidad” suficiente para llevar a cabo el complejo técnico de su espectáculo, y que tras horas de intentos por parte de su equipo, no pudo hacerse nada por salvarlo. En el texto, la rapera se mostraba “triste” y “decepcionada” por la cancelación, apuntando que algunos de sus fans venían de lugares como “Austria o Nigeria”, y prometía volver a Eslovaquia “tan pronto como pueda”.
La estampa de Nicki anunciando la cancelación a sus fans es poco menos que desoladora, aunque la promotora del concierto tiene otra versión de los hechos. En Facebook, ha publicado un comunicado en el que asegura que ha sido “la artista” quien ha cancelado el concierto por motivos desconocidos, y que el recinto cumple con todos los requisitos técnicos para llevar a cabo su concierto y cualquier otro. “Hemos producido grandes espectáculos de Rammstein, Depeche Mode, Eros Ramazzotti, Lenny Kravitz, OneRepublic y muchos otros”, apunta el texto, que añade que esta es la primera vez “en casi veinte años” que cancela un concierto.