‘La Gran Esfera’ ha sido el primer álbum de La Casa Azul en ocho años, y los créditos de producción indican que ha sido «grabado, mezclado y producido» por Guille Milkyway en su estudio personal de Sant Cugat del Vallès. A su vez, las voces han sido «grabadas y editadas» por Juan Sueiro en los Estudios 54 de Torrelodones y todo esto ha sido masterizado por Xavier Alarcón en los Minilabs Studios de Valldoreix. El diseño de la portada, que muestra a Milkyway protegiendo una bola de luz en cuyo interior se encuentra él mismo, es obra de Lluís Domingo, y el «diseño adicional» de Luis Calvo de Elefant.
La edición física de ‘La Gran Esfera’ no incluye agradecimientos, pero sí las letras impresas en uno de los encartes. Y se agradece, porque la cantidad de conceptos imposibles que presenta en ellas Milkyway -muchos de los cuales incluyen adjetivos que terminan con el sufijo «-al» valdría un glosario independiente: equilibrio estructural, sistema secuencial, desgaste natural, flujo neuronal, colapso gravitacional, hipersueño emocional, morfogénesis mental, astenia emocional, estruendo demencial, cámara anecoide esferoidal, encaje mental, agotamiento bilateral… por no hablar de conceptos tipo cosmocócico, «equilibrio hidrostático» o «Maglev» de los que en mi vida he oído hablar. Sin duda, es todo un entretenimiento descubrir qué significan estas palabras mientras suena de fondo uno de los álbumes de pop más emocionantes del año.