Los singles posteriores de Zara Larsson no han repetido el impacto de ‘Ruin My Life’ ni mucho menos el de ‘Lush Life’, pero no estaban nada mal (a excepción, en mi opinión, de ‘WOW’, una producción de Marshmello que suena a lo peor de 2012). Por un lado, ‘Dont Worry Bout Me’ era una fina producción de tropical-pop vinculable a la última Tove Lo antes de que esta editara su último álbum, y por el otro, ‘All the Time‘ era una canción de bubblegum-pop divertida y ultra adictiva. En una palabra, perfecta. ¿A qué se debe su fracaso? Puede que el mercado esté saturado de voces parecidas a las de Larsson; puede que sea ahora, con el éxito de Dua Lipa y el «comeback» de Lady Gaga, el momento idóneo para que una canción como ‘All the Time’ pueda triunfar. O puede que, simplemente, las canciones no fueran tan especiales. En cualquier caso, el tercer disco de Larsson sigue sin salir tres años después de ‘So Good‘, y aunque el retraso puede deberse al fracaso de sus últimos singles, Zara ha explicado que la razón es que no se siente «satisfecha» con el álbum.
Lo hacía en un post de Instagram publicado en agosto de 2019, uno de los más honestos que hemos podido leer de cualquier estrella del pop. Explicaba la razón del retraso (ya mencionada), y además compartía una reflexión muy sincera sobre las presiones de ser una «pop star»: «Intento no sentirme presionada por ello, ni comerme la cabeza con ello o escuchar las opiniones de los demás sobre lo que debería o no debería estar haciendo. Pero es muy difícil ser una cantante pop, al menos si tu objetivo es ser mainstream, porque te sientes juzgada con cada lanzamiento. Parece que cada canción que saco tiene que ser un single. Es difícil hacer cosas «solo por diversión» o probar cosas nuevas. Al mismo tiempo, no quiero que la gente se olvide de mí». La cantante apuntaba que su intención siempre había sido sacar disco por año, pero que ante todo busca sentirse orgullosa de su trabajo, algo que en ese momento no estaba sucediendo. «Me prometí a mi misma no comprometer mi música y no lo haré».
Es difícil prosperar en ese limbo entre el mainstream y el indie. Estrellas del pop independientes como Allie X o Tinashe publican discos y salen de gira sin necesidad de contar con el apoyo masivo de Ariana Grande o Post Malone; otras como Charli XCX o Kim Petras llenan salas gracias a su éxito en internet más que en las listas de éxitos. Sin embargo, las expectativas son mayores para Zara Larsson: está en una multi, viene de arrasar con ‘Lush Life’, su debut se vendió bien… La historia del pop ha demostrado que retrasar una obra sine die puede no servir para absolutamente nada, pero al menos Zara parece dispuesta a compensar este «silencio» discográfico con música de la que sentirse orgullosa. Mientras, sus colaboraciones con BTS o cinematográficas (ha cantado ‘Invisible’, la canción principal de la película animada nominada al Oscar ‘Klaus’, de factura española) mantienen su nombre en la actualidad musical. ¿Será 2020 el año en que podamos escuchar su tercer disco?