La manera de Jessie Ware es por supuesto una elegancia y sutileza máximas, y el enésimo sencillo extraído de la cantante aplica este modo a lo grande. De nuevo hecha para evocar el glamour de las pistas de baile de los años 70 y 80, ‘Save a Kiss’ es una canción de diva disco con todas las letras, y lo logra mediante una producción de James Ford y Midland que adorna una base típicamente deep house con las cuerdas disco de rigor y un robusto motivo de sintetizador que remite a la Robyn de ‘Dancing On My Own’ y ‘Call Your Girlfriend’.
Empleando pues estilos de la música disco, el house y el electropop, y también algún retazo góspel en los coros, ‘Save a Kiss’ construye una euforia majestuosa y sutil para contarnos una historia clásica de deseo y pasión incontrolables, pero expresada con la mayor de las contenciones. Al fin y al cabo esta canción se llama «guárdame un beso» y su espíritu es el de la absoluta anticipación: en ella, Ware está «aprendiendo a ser paciente» porque su amado «se guarda lo mejor para el final». Poco a poco esa tensión se resuelve en un estribillo «solo quiero un poco de tu amor» que, pese a su expresada timidez, suena grande y explosivo, marcando el momento más «diva» de la canción.