Emprendida por Atlantic Records, la idea tras #BlackoutTuesday es «tomarse el día para desconectar del trabajo y reconectar con nuestra comunidad» y llamar a una «acción urgente para rendir cuentas y provocar un cambio». Sus dos artífices, Jamila Thomas y Brianna Agyemana (ambas de Atlantic) han explicado que, «como guardianes de la cultura, nuestro trabajo es unirnos para celebrar las victorias, pero también para apoyarnos en la pérdida», y señalado: «la industria musical es una industria multimillonaria, una industria que se ha aprovechado predominantemente del arte negro». La intención es instigar a las grandes empresas de la industria a «proteger y empoderar a las comunidades negras que les han enriquecido desproporcionadamente».
Varias discográficas se han sumado a la iniciativa, como Columbia, Def Jam, Interscope, Sony y Warner, así como multitud de artistas, de Rihanna a Vetusta Morla pasando por Radiohead (que han eliminado todos sus vídeos de Youtube), Björk o Massive Attack. Otros, como Kehlani, Azealia Banks o Bon Iver (en un tuit ya borrado), han sido críticos con ella, cuestionando su utilidad. Por otro lado, los usuarios animan a NO usar el hashtag #BlackLivesMatter durante la iniciativa para evitar la propagación de imágenes en negro a través de este canal, usado para denunciar casos de racismo y brutalidad policial y para compartir enlaces a canales de ayuda al movimiento.